Señor director:

Los argentinos estamos necesitando de un crecimiento social que nos lleve a comprender que sin esfuerzo ni dedicación difícilmente podamos conseguir que el país salga adelante. No tenemos espíritu de sacrificio y queremos que todo nos venga de arriba. Con esto no quiero decir que todos deberíamos trabajar como esclavos, pero hay que poner un poco más de empeño en las labores que nos tocan cumplir cada día.

El crecimiento social de un pueblo se consigue con el esfuerzo de todos, pero también con la colaboración de todos.

Preparémonos y preparemos a las futuras generaciones para que sean laboriosas y dedicadas al trabajo que les corresponda. Todo esfuerzo es al final recompensado, hagamos entender eso y tendremos un país mejor.