Señor director:

Para el lector desprevenido o el vecino de toda la vida, el título de esta pequeña nota puede referenciar al punto geográfico en este hermoso departamento sanjuanino donde se emplaza o desplaza la mugre que genera nuestra empecinada campaña por destruir lo bello. Lo natural. Las enormes riquezas que nuestra tierra nos da. Pero no. El basural de Zonda abarca mucho más que un lugar geográfico puntual. El basural de Zonda incluye calles en pésimo estado, basura amontonada en banquinas, talas indiscriminadas de especies autóctonas . Una fotografía de hoy. Una imagen cultural. Un diagnóstico de que algo anda mal. Que no funciona. O tal vez de que en realidad, vivimos en una sociedad gobernada por mugrientos, para mugrientos. Donde todos somos felices. Administradores de pobreza que se enojan y resienten cuando se los critica. Pero poco aprenden durante su efímero y vernáculo reinado en como hacer de su patria chica un lugar mejor. Ignorantes en la preservación de recursos que son nuestros. Del colectivo social. De nuestra especie y de las especies con las cuales deberíamos compartir el medioambiente. Medioambiente que es de todos y no es de nadie, al igual que el basural de Zonda.