Señor director:
San Juan es tierra de montañistas. Ya en antaño, los incas e incluso quizás sus antecesores, subieron montañas. En tiempos modernos aguerridos pioneros escribieron con letras de oro importantes logros, entre ellos la exploración de los cerros y nevados de la provincia e incluso años después, sanjuaninos llegaron a los más altos picos del Himalaya. Nuevas generaciones siguen con esta mística y valores, sea subiendo pequeñas cumbres precordilleranas o imponentes montañas. Por ello duele y molesta que una comprovinciana, corredora de montaña, descalifique a los montañistas, su actividad y valores con pueriles declaraciones efectuadas luego de, supuestamente, lograr un récord de ascenso rápido. Este récord no pudo ser validado y la corredora debió ser ayudada por el equipo de rescate sufriendo lesiones que eventualmente podrían haberle ocasionado la muerte y poner en riesgo a sus rescatadores. Para nosotros, las cumbres no son para récords, más bien son para estar en comunión con uno mismo y la naturaleza, hacer actividad física a la par de disfrutar del entorno y de la amistad. Ojalá el tiempo le muestre esta realidad, abrirle los ojos y pedir las necesarias disculpas a los cultores de tan noble deporte.
