Está escrito en el sobre y una serie de fotos, que mi padre, José Mazuelos, fotógrafo profesional, plasmó cuando Aerolíneas Argentinas, se instaló en San Juan. Fue el 11 de julio de 1951. Días antes o días después, lo cierto es que desde ese año, nuestra provincia y los sanjuaninos, quedaban conectados a todo el país a través del avión de nuestra aerolínea de bandera, cambiando un poco su historia y entrando a la modernidad. Con las oficinas sobre calle Mendoza, entre Santa Fe y avenida Córdoba, unas dependencias muy rústicas, sencillas y cálidas. Visitarlas y comprar los pasajes era cambiar el estilo de viajar.
Al principio, los sanjuaninos eran un poco reticentes a lo que todavía no habían experimentado. Se trataba de un medio de transporte desconocido hasta ese entonces. Por lo cual, a muchos se les hacía un tanto difícil subir al avión. Estos “monstruos” de dos alas, de gran porte y ruidosos, que sin problemas tomaban vuelo por los cielos, dejando a la tierra cada vez más chiquita y lejos.
Las fotos muestran a un avión presto a partir, y el mismo vuelo, ya en Buenos Aires. También se muestra el frente de las oficinas y el interior de la misma. En ese viaje, mi padre, siempre cargando su cámara, se trasladó por avión a Capital Federal. El motivo era recibir un primer premio de un concurso de fotos Salón Internacional de la Fotografía”.
Maravillado por la rapidez y cómo se veía el territorio nacional por la rutas invisibles del avión, éste se amalgamaba con el cielo. Entonces, San Juan, pasó a ser un poco más importante, pues se nos achicaron las distancias y alargaron los tiempos. La historia se cuenta, se escribe y también se ve. Seguimos soñando con una provincia pujante y con visión de futuro.