Señor director:
La proliferación de películas de temática religiosa es un indicador del interés que despierta este tema. En estos días llegó a salas de cines españolas el filme "Converso", de David Arratibel. El director es un agnóstico que se pregunta con honradez acerca del proceso que ha llevado a los demás miembros de su familia a abrazar la fe. Pero "Converso" es sobre todo un testimonio de diálogo auténtico que no censura la dimensión religiosa del ser humano. Es llamativo el valor que demuestran la madre del director, sus hermanas y su cuñado al hablar de su conversión. Con todo, la gran aportación de la película es la naturalidad con que esta familia afronta el tema, después, eso sí, de no pocos desencuentros. Hay en ella una enseñanza válida para toda la sociedad.
