Señor director:

Agradezco la oportunidad que este diario nos brinda a los lectores para poder expresarnos sobre lo que vivimos en nuestra comunidad sanjuanina. Quiero decir que me sumo a otras personas que en distintos momentos escribieron a este espacio y señalaron el mal estado de las señales viales, tanto verticales como las pintadas en la calle. Esto sucede en todos los departamentos del Gran San Juan. Por ejemplo, hace menos de un año las sendas peatonales en Capital estaban flamantes. Pero con el correr de los días, las demarcaciones viales fueron perdiendo su color. No solo eso, los señalizadores de avenida Paula Albarracín de Sarmiento y Sargento Cabral (ex Coll), de a poco están siendo dañados y sacados de sus lugares. Por estos días, en la mayoría de las calles la pintura de las sendas peatonales casi no se ven, en otras sólo hay vestigios y en muchas más, pareciera que nunca fueron pintadas. Es de esperar que las tareas se hagan de manera correcta, debido a que tanto las señales de tránsito como las pinturas de sendas peatonales ayudan a ordenar la circulación vehicular y peatonal. Además, permiten evitar accidentes y salvar vidas.