Señor director:
La arboleda pública cada vez está más descuidada y hasta me arriesgo a decir "abandonada". Estamos todavía en verano y se ven ejemplares de todo tipo secos o enfermos. Incluso los eucaliptus, que son leñosos y peligrosos cuando hay viento zonda, debido a que sus ramas se desgajan con mucha facilidad y caen al suelo pudiendo provocar graves daños. No quiero mencionar departamentos en especial, pero se pueden ver por todo el Gran San Juan e incluso más allá también. Es imperiosa la necesidad de que los municipios trabajen en forma urgente para erradicar los árboles secos y reemplazarlos como también tratar a esos que tienen algún tipo de peste. Con este clima brutalmente tórrido necesitamos cada vez más de arboleda pública.
Damaris Ferreira
DNI 9.592.521
