Señor director:
Nuestro prócer, el Maestro de América, Domingo Faustino Sarmiento, fue tan visionario que hasta tuvo en cuenta a los animales y el cuidado que los ciudadanos debíamos tener por ellos. Sin dudas, que el gran sanjuanino sufrió las temperaturas que a veces se tornan extremas ya sea en invierno como en el verano. Es por eso que aconsejó que seamos compasivos con los animales. En ese sentido, sabiendo que andan por las calles perros sin dueños, sería bueno que coloquemos en el frente de nuestras casas, debajo de los árboles, algún recipiente con agua limpia y fresca para calmar la sed de estos animales. A veces, los conocemos porque andan por las calles del barrio o quizás del centro. También podríamos dejarles algo de comida. Los animales son agradecidos de la mano amiga que les demuestra cariño. Sigamos los consejos de nuestros mayores y tengamos amor por los animales.