Señor director:

Cuando nuestro entorno está "enrarecido”, quizá por situación social, política,nuestro espíritu nos pide "volar”. Si, necesita "aire puro” para " respirar”, para "recrearse”, para poder vivir. Nuestro ser es una totalidad, de allí el dicho "no sólo de pan vive el hombre”. Por ello, la necesidad de "alimentar” también el espíritu. Son los momentos que valoramos más, contemplar la belleza de la naturaleza, o acercarnos al mundo "creado” por el hombre: el arte. Escuchar buena música, nos eleva. "Meternos” en un cuadro de Jean Miró, es trasladarnos a la campiña francesa. "Escuchar” el silencio, es reencontrarnos con una riqueza interior, que te permite volcar en letras emociones sentimientos, o transitar un mundo imaginado que también te permite "volar”. Lo importante es no "asfixiarte”, sino vivir tu libertad. Tu libertad interior.

 

Beatriz Albaladejo  –  Lic. en Ciencias Políticas