Un total de 1,4 millones de hogares perderán los subsidios a la electricidad y el gas, ya que no completaron el registro para seguir recibiéndolos, a pesar de que tienen el beneficio de la tarifa social. Estos usuarios no ingresaron los datos en el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE). Por ahora, el gobierno analiza lanzar una nueva campaña de información para que lo hagan, pero los beneficios los perderían a partir de diciembre.
Según Energy Report, de los 1,7 millones de familias que debían realizar el trámite del RASE, solo lo hicieron 300.000, apenas el 18% del total. La posibilidad de ingresar los datos al RASE se abrió en junio por 60 días y en agosto se extendió por otros 30 días hasta el 4 de septiembre. Desde entonces, la Secretaría de Energía está analizando los pedidos que se hicieron.
Es que el gobierno de Javier Milei avanza en una “depuración” de algunos beneficiarios que, entiende, no necesitan recibir asistencia del Estado para afrontar el pago de sus facturas, como parte del ajuste fiscal.