En el arranque de la Cumbre del G-7 en Bari, Javier Milei tuvo un cálido encuentro con la primera ministra italiana Giorgia Meloni, mientras que también cruzó un breve intercambio con el papa Francisco, quien advirtió que los humanos no deben perder el control de la inteligencia artificial (IA).
En medio de las reuniones y encuentros informales, Milei participó con el resto de los mandatarios de la tradicional “foto de familia” de la cumbre internacional que se desarrolla en la localidad turística de Borgo Egnazia, sobre el Mar Adriático, a unos 500 kilómetros de Roma.
Milei fue recibido por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, con quien se fundió en un cálido abrazo e incluso protagonizaron un breve intercambio cercano en el que el libertario le habló al oído lo que provocó la inmediata risa de la ultraderechista.
Minutos más tarde, Milei se topó con el papa Francisco en el Salón Plenario del G-7, otro de los invitados de Meloni que viene de mantener un encuentro con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof. De forma breve, el Presidente saludó al Sumo Pontífice con un apretón de manos y un abrazo ante la atenta mirada del presidente de los EEUU, Joe Biden, con quien Milei mantuvo un breve encuentro. Precisamente, el embajador estadounidense en Buenos Aires, Marc Stanley, difundió fotos del encuentro entre Biden y Milei. “¡Estoy muy contento de que nuestros presidentes hayan tenido la oportunidad de encontrarse hoy en la reunión del G-7 en Italia!”, escribió Stanley.
La sexta sesión de la cumbre, ya con la participación de Milei, abordó la problemática de la inteligencia artificial. El argentino, sentado junto a Biden, expuso su visión ya expresada en su reciente viaje a Silicon Valley, California, y volvió a proponer al país para construir una base de desarrollo de inteligencia artificial para la región con inversión de privados.
El dólar blue, a $1.280
El dólar blue registró la mayor suba diaria en más de tres semanas y quedó a un paso de su récord. Ayer la divisa estadounidense en la franja informal subió a $1.250 para la compra y a $1.280 para la venta.