Este viernes se registraron graves incidentes en el partido bonaerense de Moreno, donde un grupo de vecinos protestó frente a la Municipalidad tras el asesinato de Lucas Aguilar, un joven delivery de 20 años que murió apuñalado al intentar defender a un vendedor ambulante de un ataque a cuchillazos.
Todo arrancó en horas de la mañana cuando un nutrido grupo de repartidores, algunos compañeros de la víctima, y vecinos se congregaron en la Plaza Mariano Moreno para pedir justicia y acciones contra los robos que se vive en lugar, pese a que el asesinato -al parecer- no tendría relación con un hecho de inseguridad.
Para resguardar el edificio, se formó un cordón de policías del cuerpo de Infantería. Sin embargo, la bronca desatada por el crimen de Lucas es mayor. Algunos incluso se treparon por la fachada y rompieron los vidrios con sus propias manos.
No solo arrojaron piedras. Los manifestantes también atacaron a los policías y a la sede con neumáticos y conos. Los efectivos después de determinado momento comenzaron a disparar balas de goma. La situación llegó a tal nivel, que algunos vecinos comenzaron a pelearse entre ellos. La Policía, en consecuencia, detuvo a los manifestantes.
Ismael Castro, secretario de Seguridad de Moreno, dijo que la situación estaba controlada y confirmó que hubo varias detenciones luego de la manifestación. “Hubo muchas agresiones a policías”, dijo el funcionario al canal TN.
“Entendemos lo que sucede. Existen situaciones de delito y venimos trabajando. Pero lo que vemos es una ola creciente de violencias, de conflictos personales, que antes no derivaban en homicidios y ahora sí se está viendo”, dijo el secretario ante los reclamos de los vecinos.
“Hay una escalada de violencia que se derrama en todo el país”, añadió. “Trabajamos a diario con la Policía Bonaerense para la cobertura de cuadrículas con patrullajes”, remarcó el funcionario, quien dijo que hay que ponerle más recursos a la seguridad para seguir combatiendo el delito.
“El caso de Lucas no fue un robo”, aclaró el secretario de Seguridad. Respecto al agresor dijo que se trata de un delincuente “sin ninguna contemplación por la vida”. Destacó, además, el compromiso de Lucas.
El crimen que desató la protesta
Lucas Aguilar, el joven asesinado, había expresado su preocupación por la inseguridad en Moreno durante una entrevista con C5N horas antes de su muerte.
En la entrevista, relató cómo los robos eran frecuentes en la zona y compartió su propia experiencia de haber sido víctima de intentos de robo en varias ocasiones.
Horas después, Aguilar se convirtió en víctima de un violento ataque mientras intentaba detener a un delincuente que había agredido a un vendedor ambulante.