La interna en el Pro, que tiene arriba del ring al titular del partido, el expresidente Mauricio Macri, y a Patricia Bullrich, se puso color de hormigas y salpica al Gobierno. Es que la ministra de Seguridad echó ayer de forma sorpresiva al número dos de su cartera, Vicente Ventura Barreiro, a quien acusó de haber tenido un supuesto accionar poco transparente en una licitación para comprar alimentos para el Servicio Penitenciario Federal (SPF). Además, la funcionaria lo denunció ante la Oficina Anticorrupción (OA).

Ventura Barreiro es un dirigente de extrema confianza de Cristian Ritondo, el jefe del bloque de diputados de Pro que es un ladero de Mauricio Macri en el partido, con lo cual el desplazamiento que decidió Bullrich también tiene una lectura política interna.

Bullrich aseguró que decidió desplazar al secretario de Seguridad porque intentó “interferir en un proceso licitatorio de servicios de comida” para el (SPF). Antes de la toma de posesión, Milei dispuso que esa fuerza, que estaba a cargo del Ministerio de Justicia, pasara a depender de Seguridad. Bullrich designó en la subsecretaría de Asuntos Penitenciarios a Julián Curi, un hombre con pasado en la UCR que conoce desde hace años y que la acompañó recientemente en su visita a El Salvador.

“Esta licitación de servicios de comida es un proceso inédito porque rompe con un monopolio de muchos años y permite participar a más de 300 empresas, cuando venían participando históricamente un grupo de solamente quince”, explicó Bullrich.

Además, sostuvo que “la transparencia” es una “bandera” y un “compromiso” del gobierno de Javier Milei. Hace apenas quince días, el Ministerio de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, desplazó al secretario de Niñez, Adolescencia y Familia, Pablo de la Torre, en medio de la polémica por los alimentos sin repartir. Pettovello acusó a De la Torre por las contrataciones externas que fondea la Organización de Estados Iberoamericano (OEI).

El corrimiento de Ventura Barreiro, el funcionario que manejaba la botonera de la cartera en la diaria y que había tenido un fuerte protagonismo en los operativos antipiquetes en las calles, provocó un cimbronazo en la estructura de Pro.

Los rivales internos de Bullrich sospechan que buscó una “excusa” para desprenderse de su número dos después de que estallara el conflicto en Buenos Aires por el control de Pro. Macri apoyó a Ritondo, jefe político de Ventura Barreiro, en la pulseada con Daniela Reich para quedarse con la presidencia del partido en el territorio bonaerense.