Promesas frente a los reclamos y más dudas que certezas. Esta fue la sensación que se llevaron los gobernadores de Juntos por el Cambio (JxC), entre ellos el sanjuanino Marcelo Orrego, tras la reunión en la Casa Rosada con el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, a la que luego se sumó el asesor estrella de Javier Milei, Santiago Caputo.

Entre otros asuntos, sobresalieron reclamos por la obra pública y el reproche por el financiamiento para las cajas previsionales de las provincias no transferidas a Nación.

Nueve de los diez gobernadores de JxC, solo faltó el correntino Gustavo Valdés, acorralado por el caso Loan, fueron a buscar un trato preferencial del Gobierno nacional por su apoyo político a la sanción de la Ley Bases y el paquete fiscal.

Los mandatarios provinciales le pidieron al Ejecutivo una solución al pago de la deuda de las cajas de Anses y se barajó la posibilidad de cancelarla con lo que adeudan las provincias a Nación. Acordaron juntar a los equipos técnicos para avanzar en el detalle. “Una de las ideas es compensar. Es decir, netear deuda con otras deudas. Eso sería una solución de costo fiscal cero”, planteó una fuente.

Gran parte del temario giró en torno al conflicto abierto por los fondos que adeuda Nación para el pago de jubilaciones y pensiones provinciales.

Entre las cajas afectadas se encuentran las de Santa Fe, Chaco, Chubut, Corrientes y Entre Ríos. Pero no todas las provincias tienen la misma situación. Chubut, por ejemplo, tiene, a su vez, una deuda con Nación. Torres, entonces, pretende que se compensen ambos pasivos. Otras provincias, en cambio, no tienen deudas con Nación.

Hubo además un reclamo por el pago de deuda a contratistas en los proyectos de obra pública que fueron cedidos a las provincias. En ese sentido, Francos también se comprometió a avanzar con el financiamiento de los proyectos de obra pública nacional que le quedaron a Nación. Se trata de rutas y puentes, a los que no habilitó todavía el presupuesto.

Estuvieron presentes en el extenso intercambio Leandro Zdero (Chaco), Ignacio Torres (Chubut), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Carlos Sadir (Jujuy), Alfredo Cornejo (Mendoza), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Poggi (San Luis), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Jorge Macri (Ciudad de Buenos Aires).

El cónclave había sido pedido por los gobernadores de Pro y de la UCR luego del Pacto de Mayo.

“Fue una reunión seria y de trabajo. Los gobernadores vinieron con algunos pedidos y se va a seguir trabajando en esos problemas”, dijeron desde Casa Rosada, buscando relativizar diferencias y consideraron la reunión como “positiva”. Sin embargo, varios de los caciques cambistas se irritaron al conocer que el Gobierno decidió otorgar más subsidios a los colectivos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) por unos $20.000 millones al mes para evitar otro aumento de tarifas. “Al final lo benefician a (Axel) Kicillof. Si hay subsidios al transporte tiene que ser para todas las provincias”, se quejó uno de los mandatarios.

Otro reclamo puntual tuvo que ver con Vialidad. En el Gobierno decidieron desplazar a los funcionarios de ese organismo en las provincias. Habitualmente, la persona que va a ese cargo es elegida por los gobernadores. Pero, por el armado político de La Libertad Avanza, desde Casa Rosada quisieron que en las delegaciones de Vialidad de todo el país hubiera referentes propios para tener una construcción de cara a 2025.