Las fiestas navideñas son una ocasión especial para compartir momentos con seres queridos, y la mesa de dulce es uno de los atractivos principales. Hay muchas alternativas saludables sin renunciar al sabor y al espíritu festivo. Aquí algunas opciones:
Base de frutas frescas y deshidratadas: Selección frutas de temporada como uvas, manzanas, mandarinas o frutos rojos a las cuales se la pueden presentar en brochetas, bandejas decoradas o en forma de figuras navideñas como árboles o estrellas. Añadir frutas deshidratadas como dátiles, orejones o higos, que son naturalmente dulces y aportan textura le darán el toque ideal.
Postres caseros con ingredientes integrales: Preparar galletitas con harinas integrales, endulzadas con miel y decorarlas con chocolate amargo o frutos secos. Además, bizcochos o brownies hechos con harina de avena o almendra y endulzados con puré de plátano o manzana también son buena opción.
Snacks crujientes: Otra delicia es hacer mix de frutos secos con, por ejemplo, almendras, nueces y pistachos, y semillas de chía, sésamo, girasol también pueden servirse antes del brindis. Añadir chips de coco o de manzana horneados como alternativa a los snacks procesados son buenos.
Chocolates y dulces: Usar chocolate con alto porcentaje de cacao para preparar bombones rellenos de mantequilla de almendra, frutas o semillas para preparar trufas caseras con cacao, dátiles y frutos secos triturados.
Bebidas naturales: Se pueden acompañar con infusiones de agua saborizada con rodajas de naranja, canela y romero.
“La comida entra por la vista”, por eso, además de pensar, prepararlos, antes de disfrutarlos presentarlos en la mesa es un paso fundamental. La decoración no es un detalle menor y, es en este caso es bueno presentar los dulces en bandejas o platos de madera para un estilo rústico y cálido. También se pueden agregar detalles decorativos como ramas de pino, piñas naturales, y servilletas con motivos navideños.
Una mesa dulce con estas opciones no solo aporta un equilibrio entre sabor y nutrición, sino que también promueve hábitos más conscientes durante las fiestas y permite disfrutar de los momentos especiales sin la pesadez de los excesos.