“Se viene una cataratas de juicios”, “transfuguismo” y” hay diputados que tienen una urna en la cabeza”. Estas frases repetidas en los primeros tramos de la tensa sesión en la Cámara baja eran el termómetro que anticipaban un resultado a medida de las pretensiones del oficialismo. Y así se resolvió la votación con un triunfo pírrico para el oficialismo en Diputados ya que logró -con la ayuda clave de cinco legisladores de la UCR- ratificar el veto del presidente Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria sancionada por la oposición y que buscaba aumentar los haberes de los jubilados.

La Libertad Avanza (LLA) consiguió avalar el veto presidencial pese a que la insistencia de la ley cosechó más votos a favor que en contra: fueron 153 apoyos, 87 rechazos y 8 abstenciones.

Sucede que para poder revertir el veto, la oposición necesitaba una mayoría de las dos terceras partes de los votos: al haber votado 248 diputados, se requerían 166 voluntades.

Quedaron a 13 votos, a cierta distancia del objetivo de los dos tercios. Ni los cinco votos a favor del Frente de Izquierda, que en la sesión de junio pasado habían optado por la abstención, alcanzaron para acariciar la meta.

El bando a favor de la mejora jubilatoria perdió siete votos respecto del resultado de la sesión de junio. La sangría se debe al giro copernicano de cinco diputados radicales y el cambio del voto de los legisladores de Innovación Federal, que en junio habían apoyado la reforma jubilatoria y esta vez se abstuvieron.

En cambio, quienes se atrincheraron en contra de la reforma previsional crecieron en 15 votos para llegar a los 87. En esta votación, el oficialismo requería 83 votos para superar el tercio y blindar el veto.

Le sobraron cuatro diputados nacionales. Por eso fue clave que se haya dado vuelta un grupo de cinco diputados de la UCR que en la víspera se había reunido con Milei en la Casa Rosada.

Los legisladores radicales que decidieron desmarcarse de la conducción del bloque y votar a favor del veto fueron Martín Arjol, Luis Picat, Mariano Campero, Pablo Cervi y el liberal correntino Federico Tournier, un hombre del gobernador Gustavo Valdés que se había incorporado recientemente a esa bancada.

De estos cinco, quien llamó más la atención fue el tucumano Campero, quien fue aplaudido de pie por toda la bancada liberal cuando pidió una intervención para justificar el sentido de su voto, totalmente contrapuesto a la posición que tuvo en la sesión de junio.

“No voy a ser partícipe de una desestabilización que quieren hacer los kirchneristas”, aseguró, y recibió la ovación de los liberales.

La ley de reforma jubilatoria que había sido vetada por el mandatario establecía un aumento del 8,1 por ciento para compensar la pérdida sufrida por la inflación de enero y un nuevo piso de haberes mínimos, además de un aumento adicional en marzo de cada año tomando en cuenta la variación salarial.

El Presidente habló de los “87 héroes”

El presidente Javier Milei destacó la ratificación del veto a la ley de reforma jubilatoria al celebrar que “87 héroes (diputados) le pusieron un freno a los degenerados fiscales”. “Hoy 87 héroes le pusieron un freno a los degenerados fiscales que intentaron destruir el superávit fiscal que los argentinos con tanto esfuerzo logramos conseguir”, expresó Milei desde sus redes sociales. En ese sentido, el mandatario destacó que ‘impidieron a un grupo de irresponsables adoptar medidas populistas que habrían quebrado las arcas públicas’.