Seis meses después de su asunción y un camino lleno de obstáculos en el Congreso, el presidente Javier Milei avanzaba anoche a paso firme hacia su primer logro político real: gracias al apoyo de la oposición dialoguistas, el Gobierno de La Libertad Avanza tenía los votos asegurados para aprobar de manera definitiva la Ley Bases que -aunque muy acotada en su articulado respecto a la original ley ómnibus- le abre paso a un conjunto de reformas económicas, impositivas, laborales y sociales, claves para la hoja de ruta que se planteó el Gobierno. La votación se esperaba para la medianoche pero ya era un hecho que la ley contaba con los votos necesarios para su aprobación definitiva con las correcciones que el hizo en Senado.

La otra batalla que le quedaba al oficialismo la tenía casi ganada: el paquete fiscal, que se votaba después de la Ley Bases, tenía asegurada su aprobación en general, pero anoche, al cierre de esta edición, aún había incertidumbre sobre e destino final para la restitución del Impuesto a las Ganancias en la categoría sueldos y la rebaja de Bienes Personales, que el Senado dejó afuera.

Las negociaciones seguían anoche con final abierto.

Tras años de una crisis que ha llevado la inflación encima del 200% anual y ha disparado la pobreza a casi el 50% de la población, Milei -quien ha tratado de ‘golpistas’ a los legisladores que se opusieron a los proyectos- busca con la sanción de la norma una victoria política que le permita mostrar capacidad de gestión ante los mercados que en los últimos días le pusieron un signo de interrogante a la acumulación de reservas con una corrida del dólar blue.

La sesión empezó después de las 12:30 pero el debate sobre los proyectos demoró algunas horas más. Con una lista de 40 oradores anotados, se preveía que la votación de la Ley Bases se lleve a cabo a la medianoche.

El oficialismo tiene asegurados los 129 votos que necesita como piso para aprobar el proyecto insignia de la gestión de Milei y confía en superar los 140. Con esto se garantizaría la sanción final y definitiva de la ley tras los cambios que le hizo el Senado.

Con el acuerdo entre el oficialismo y los dialoguistas para aceptar esas modificaciones, la votación de la Ley Bases será una sola, a diferencia del paquete fiscal que se votará en cuatro partes: en general primero y luego los capítulos que el Senado eliminó y que el Gobierno quiere reincorporar, donde se destacan Ganancias y Bienes Personales.

En cuanto al paquete fiscal, el oficialismo también tiene los votos suficientes para aprobarlo con alrededor de 140 voluntades a favor, pero el foco del Gobierno estaba puesto en Ganancias, un impuesto coparticipable.

De acuerdo a las fuentes consultadas ‘los votos están’ para aprobar ambos puntos aunque la definición podría ser ‘más ajustada’, debido al rechazo de legisladores patagónicos, de un sector díscolo de la UCR y parte del bloque de Miguel Pichetto. No obstante, tanto en el oficialismo como en la oposición confían en tener los 129. Sin embargo, legisladores de Unión por la Patria y de la izquierda adelantaron que podrían recurrir a la Justicia para detener la aplicación de leyes que consideran que rozan la ‘inconstitucionalidad’.

Los que presionan por este tema son algunos los gobernadores del Norte que son los más necesitados de recuperar la recaudación que perdieron al eliminarse Ganancias el año pasado. El catamarqueño Raúl Jalil se destaca entre ellos porque sus cuatro diputados evitarían votar en contra de Ganancias: con ausencia o abstención, ayudarían al Gobierno.

>Una pobre protesta

La protesta contra la Ley Bases pasó sin incidentes y con una baja participación. El 12 de junio pasado, cuando la ley fue aprobada por el Senado, una multitud marchó en oposición. Esta vez, sólo se movilizaron partidos de izquierda y algunos sindicatos y movimientos sociales.