Los números de recaudación del primer cuatrimestre muestran el apuro que el Gobierno tiene por conseguir los votos necesarios en el Senado para aprobar la reforma fiscal. La información oficial al cierre de abril muestra una fuerte caída en términos reales de los ingresos del fisco, especialmente en los ligados a la actividad económica.
Aún con una estimación optimista de inflación para abril de 8%, la consultora Outlier calculó una caída interanual de 12% real en el cuarto mes del año. El cálculo de Iaraf, con un índice de precios estimado en 8,8% resultó en una baja de 13% en términos reales.
Los únicos tributos que lograron crecer a valores de dos dígitos en abril fueron el impuesto PAIS y las retenciones (61,8%, según Iaraf), que no se coparticipan. Con respecto al primero, desde Aurum indicaron que el recargo sobre las compras de dólares sigue siendo “el sustento fundamental de las arcas estatales”, con una suba interanual real de 210% en abril.
La recaudación de los impuestos relacionados con la actividad económica disminuyó en el último año. Según los cálculos de Outlier, continúan las caídas reales interanuales en la recaudación del Impuesto a las Ganancias (-35% real anual, afectado por la reforma de 2023), seguridad social (-18%, afectado por la caída de los salarios reales), IVA (-8% real interanual, caída del consumo), impuesto al cheque (-6,3%, menor valor real de las transacciones bancarias gravadas).
Para el primer cuatrimestre, en tanto, la baja real acumulada llegó a 10,4%, de acuerdo con el cálculo de Outlier. “En pesos constantes, la recaudación tributaria de los primeros cuatro meses de 2024 es la segunda más baja desde 2007 (en 17 años), sólo superada por la del primer cuatrimestre de 2020 (pandemia y cierre)”, señaló un reporte de esa compañía, que también destacó que el resultado se dio “a pesar del incremento de la presión tributaria nacional que implicó la ampliación de la base del imponible y suba de alícuota del impuesto PAIS”, aunque la reforma del impuesto a las Ganancias realizada en 2023 jugó en contra de la recaudación.
Presión por la reforma fiscal
Teniendo en cuenta esos números, para el Gobierno es fundamental la aprobación de la reforma fiscal, que apunta a recomponer los ingresos del fisco mediante la restitución del impuesto a las Ganancias para los empleados en relación de dependencia y el incremento de las cuotas del monotributo. Por otra parte, habrá un aporte extra por el pago de alícuotas por el blanqueo de capitales. Además, la Ley Bases incluye un capítulo de privatizaciones que representará dinero extra para el fisco.
Los cambios son necesarios para el oficialismo porque el Gobierno sabe que necesita diversificar sus fuentes de recaudación si pretende levantar el cepo al dólar, ya que una medida de ese tipo significaría la desaparición del impuesto PAIS, que se transformó en uno de los más relevantes en los últimos meses.