Tal como venía testeando el Observatorio de la Deuda Social de la UCA en sus últimas mediciones, el índice de pobreza mostró un fuerte descenso en el segundo trimestre de 2024 ya que en un plazo de seis meses bajó casi 15 puntos porcentuales: de 52,9% a 38,1%. También bajó en la comparación interanual ya que en el segundo semestre de 2023 la tasa de pobreza había alcanzado al 41,7% de la población.
Según los datos oficiales publicados ayer por el Indec, la pobreza fue del 38,1% en el segundo semestre de 2024 y alcanzó al 28,6% de los hogares. En tanto, un 6,4% de hogares están por debajo de la línea de indigencia, que incluyen al 8,2% de las personas.
Con respecto al primer semestre de 2024, la incidencia de la pobreza registró un descenso tanto en los hogares como en las personas, de 13,9 y 14,8 puntos porcentuales (p.p.), respectivamente. La indigencia cayó también fuertemente. Marcó 6,4% a fines de 2024 (esto implica que hay actualmente unos 3 millones de indigentes). En el primer semestre, se había disparado a 13,6%, mientras que al cierre de 2023 estaba en 8,7%.
De este modo, el segundo semestre 2024 cerró con aproximadamente 17,9 millones de personas en situación de pobreza, si se proyecta el número oficial de 31 aglomerados, a todo el país.
En San Juan la pobreza llegó al 42,3% de las personas lo que implicó una suba de 0, 7% comparado con el segundo semestre de 2023 cuando alcanzó el 41,6%. Pero si se lo compara con el semestre anterior, es decir, el primer semestre de 2024, la tasa de pobreza en la provincia cayó 8,9 puntos porcentuales: del 50,5% al 41,6%.
En los primeros seis meses del 2024, cuando el gobierno kirchnerista de Alberto Fernández transitaba sus últimos meses de gestión, la pobreza había afectado al 52,9% de la población, en tanto que el nivel de indigencia había llegado al 18,1%. Se trata de un salto en los índices a causa de la devaluación del peso en diciembre de 2023, la disparada inflacionaria, la retracción de la actividad económica, la caída del empleo y el brusco recorte de los salarios y gastos sociales.
La indigencia y la pobreza se calculan comparando los ingresos de los hogares con los valores de las canastas de indigencia y pobreza de cada región del país.
El valor monetario de la canasta alimentaria (que sirve de base para fijar el de pobreza) comprende los alimentos necesarios- como carne, lácteos, frutas, verduras,etc.- para cubrir los requerimientos energéticos de la población de acuerdo con la edad y sexo de las personas.
La mayor cantidad de pobres se registró en Gran Resistencia, donde marcó 60,8%. Le siguieron: Concordia (57,1%), Santiago del Estero-La Banda (48,6%) y Formosa (46,2%). Los partidos del Gran Buenos Aires mostraron un 42,1%.
Por regiones, las mayores incidencias de la pobreza en personas se observaron en el Noreste (NEA), 47,0%; y Noroeste (NOA), 42,8%. Las menores, por su parte, se registraron en la Patagonia, 33,5% y Pampeana, 35,6%. En los aglomerados de 500.000 y más habitantes se observó, al igual que en los aglomerados de menos de 500.000, un descenso de la pobreza de 14,8 p.p. con respecto al primer semestre de 2024.
- El gobierno celebró por los datos
El Gobierno celebró la baja de la pobreza e indigencia y destacó que “se ha registrado una fuerte caída durante el período de julio a diciembre del 2024, gracias a las profundas reformas impulsadas por el presidente Javier Milei”.