Dirigentes de la Confederación General del Trabajo (CGT), de la CTA de los Trabajadores y de la CTA Autónoma expondrán este lunes en el Senado contra la Ley Bases, mientras evalúan convocar a una movilización para el día en que se trate el proyecto en el recinto de la Cámara alta. El debate incluye acompañar la marcha con un nuevo paro nacional.
En forma paralela, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) definirá en un plenario de federal una nueva medida de fuerza para esta semana. El Secretario General del gremio, Rodolfo Aguiar, argumentó que “son las políticas impulsadas desde el Poder Ejecutivo las que empujan a los estatales a nuevas medidas de acción directa” y anticipó que la propuesta es que se vote una nueva movilización.
Tras la marcha del Día del Trabajador y del paro del 9 de mayo, las centrales obreras analizan una nueva escalada en el conflicto con el Gobierno de Javier Milei, con la mira puesta en la reforma laboral, las privatizaciones de empresas públicas y la reversión en la quita del Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría, entre otros puntos que rechazan del proyecto oficialista.
Para este martes fueron convocadas la CGT y las dos CTA por los organismos de Derechos Humanos, a participar de una multisectorial en la Facultad de Ciencias Sociales, de la UBA, espacio en el que podrían empezar a delinear los pasos a seguir en la resistencia contra la Ley Bases.
Diálogo permanente y presión en las calles
Más allá de mantener un diálogo permanente con los senadores de Unión por la Patria y con los que se autodefinen como dialoguistas, las centrales gremiales buscan mostrar en las calles la disconformidad con la ley que no lograron frenar en la Cámara de Diputados.
Concretamente, el ojo está puesto sobre los senadores que obtuvieron su banca por el peronismo y que están a un paso de darle a Milei el primer triunfo legislativo, tras tres derrotas consecutivas.
Sin embargo, el diálogo se amplía a otros legisladores de provincias en donde varias de las iniciativas de la ley entienden que pueden complicar la actividad productiva, como en el caso de Santa Fe, Santa Cruz, Neuquén, Catamarca o Tierra del Fuego. También con los que estarían en duda de acompañar al oficialismo, como en el caso de Carlos Epínola, Martín Lousteau y Pablo Blanco, por ejemplo.
Con los mismos senadores del oficialismo y de la oposición dialoguista profundizaron el diálogo los negociadores del Gobierno, con el ministro del Interior, Guillermo Francos, a la cabeza.
Si bien en la Cámara alta los senadores suelen responder a los intereses provinciales, en el contexto actual, incluso los que llegaron a su banca por el mismo espacio político que los gobernadores de los distritos a los que representan, mostraron independencia y el alineamiento no es absoluto. Por eso, de uno y otro lado, las negociaciones, los contactos y el diálogo son permanentes.
Las centrales obreras debaten cómo continuar tras el paro
En un escenario en donde todo es negociación, la CGT y las dos CTA evalúan cómo continuar tras el paro general de la semana pasada y con una Ley Bases más cerca de conseguir la aprobación del Senado que el rechazo.
“Mañana vamos a exponer las tres centrales”, confirmó a TN, Hugo Yasky, secretario de la CTA-T y diputado nacional. Mientras avanzan con sus argumentaciones contra la ley, el debate es cómo llevar a las calles el reclamo de los trabajadores. También confirmó la multisectorial del martes en la UBA.
“Las y los senadores deben escuchar y mirar hacia la calle. Ahí van a estar mujeres, juventudes, pymes, trabajadores, universidades y jubilados tomando nota de su voto. ¡Sumate vos también! Nos encontramos todos y todas en la marcha frente al Congreso el día que se trate en el Senado, con banderas celestes y blancas”, planteó Gabriel Katopodis, ministro de Infraestructura y Servicios Públicos de la provincia de Buenos Aires, y uno de los principales impulsores de la movilización.
En la lectura coincidió el líder del gremio Camionero y cotitular de la CGT, Pablo Moyano, que sostuvo que “el día que se trate tiene que haber una gran movilización para que vean que la gran mayoría –las universidades, los estudiantes, las pymes– están en contra”. “La conflictividad social va a seguir creciendo, porque no va a haber un cambio de rumbo económico”, dijo a Radio Brisas.
“Tenemos la certeza de que la lucha por anular el DNU e impedir la sanción de la Ley Bases se potenciaron a partir de esta huelga. Este es el camino de movilización y unidad que nos llevará a encontrar la victoria”, dijo Ricardo Peidro, secretario Adjunto de la CTA-A.
Sin embargo, algunos dirigentes gremiales creen que a una masiva movilización se la debería acompañar con un nuevo paro general. Por el momento, es la propuesta de menor consenso -especialmente por la cercanía con el cese de actividades del 9 de mayo-, pero advierten que podría tomar fuerza dependiendo de cómo avance el debate y el conteo de votos en el Senado.
En el Gobierno confían en que el acuerdo con los gobernadores dialoguistas, atado al Pacto de Mayo, es lo suficientemente robusto como para garantizarle los votos en la Cámara alta y anotar la primera victoria legislativa de Milei.