El ministro del Interior, Guillermo Francos, reconoció que están negociando cambios con la oposición del proyecto de Ley Bases para lograr su aprobación en el Senado. Parte de esos diálogos que se encuentran en marcha fueron anticipados por Infobae.

El Gobierno vuelve a recalcular en torno a la Ley Bases y se abren nuevas negociaciones para tratar de encarrilar el proyecto

Según explicó en diálogo con Eduardo Feinmann en radio Mitre, el objetivo es que la Cámara Alta apruebe la iniciativa en general y se introduzcan las modificaciones durante el debate en particular, lo que permitiría llegar al Pacto de Mayo con el paquete prácticamente sancionado. Esos cambios deberán ser luego refrendados en Diputados para que la ley entre en vigencia, algo que el Poder Ejecutivo da por descontado.

“Hay algunas propuestas de modificación que estamos analizando en conjunto con los senadores en algunos aspectos del RIGI: algunos legisladores entienden una cosa y nosotros entendemos otra, así que estamos analizando cómo puede clarificarse el artículo”, informó Francos.

El RIGI es el régimen de inversiones que concede grandes beneficios a empresas extranjeras que inviertan más de 200 millones de dólares en el país. La oposición no sólo entiende que esas condiciones son excesivas, sino también que significan una discriminación para las compañías locales.

Francos informó que también están analizando un reclamo de los gobernadores patagónicos sobre el Impuesto a las Ganancias, incluido en el paquete fiscal que se discute en conjunto con la Ley Bases.

Recientemente, los mandatarios de las provincias del sur del país se reunieron para discutir la cuestión y entendieron que el regreso de Ganancias afecta especialmente sus ciudadanos, mayormente empleados en las industrias petrolera y pesquera, porque tienen costos de vida más alto que en el resto del país.

El funcionario analizó además el impacto de la huelga general de la CGT realizada ayer.

“Hay mucha gente que no puede ir a trabajar y eso tiene un impacto en la economía, pero si uno analiza el estado de la opinión pública, fue un fracaso rotundo para la CGT porque la población se expresó contundentemente en contra del paro”, desarrolló.

Francos apuntó especialmente contra Pablo Moyano, a quien calificó como “el vocero del paro” y a Héctor Daer, quien en su opinión “solía ser una persona bastante reflexiva y ahora está bastante equivocado”.

El ministro del Interior encuadró la protesta como una medida de una fuerza política que fracasó en el gobierno, perdió las elecciones de una manera incontrastable y todavía no lo acepta, por eso plantea estos cuestionamientos.

Descartó de plano que este tipo de manifestaciones provoquen un cambio de rumbo: “Es todo lo contrario, no conocen a Milei, está convencido del rumbo al que ha puesto a la Argentina porque lo está percibiendo con lo que pasa internacionalmente hoy con el país, donde hay un fuerte optimismo sobre las posibilidades que ofrece”.