A partir del 1 de julio, entrará en vigencia la polémica medida anunciada por la Superintendencia de Seguros de la Nación, que elimina la obligación de las aseguradoras de ofrecer servicios de grúa y asistencia mecánica en las pólizas de autos. Esta medida, vista por muchos como un nuevo golpe a la clase media, afecta a 12 millones de asegurados que hay en el país y beneficia principalmente a las grandes empresas de seguros.
Desde el próximo mes, los seguros de autos únicamente cubrirán gastos de traslado y estadía en casos de siniestros como daño, incendio o robo, excluyendo una amplia gama de servicios esenciales. Entre los servicios eliminados se encuentran la asistencia por problemas mecánicos, eléctricos, de batería, pinchaduras, falta de combustible, hospedajes, gastos médicos, peajes y guarda de autos. Esta decisión afectará a los aproximadamente 170.000 casos mensuales que se manejan en el mercado, de los cuales el 90% son por desperfectos mecánicos.
Se estima que las aseguradoras, que actualmente pagan alrededor de 1.000 pesos mensuales por vehículo a las compañías de asistencia, se ahorrarán aproximadamente 12 mil millones de pesos al mes con esta medida. Sin embargo, no se espera que esto se traduzca en una reducción en el costo de los seguros, ya que los asegurados seguirán pagando la misma cuota recibiendo un menor servicio.
Frente a esta decisión, la Asociación de Consumidores y Usuarios de la Argentina (ACUDA) inició una acción colectiva en defensa de los derechos de los consumidores con el objeto de obtener la nulidad del artículo 2° de la Resolución de la Superintendencia de Seguros de la Nación que impone esas modificaciones, privando a los usuarios de un beneficio que previamente estaba incluido en sus pólizas de seguro.
Además de solicitar la nulidad del artículo mencionado, ACUDA ha presentado una solicitud de medida cautelar para que, en lo inmediato, se mantengan los servicios de remolque en las condiciones anteriores a la entrada en vigor de la resolución impugnada.
Juan Pablo Mosquera, abogado de la entidad, señaló que “esta modificación intempestiva de las condiciones del seguro automotor significarán que los consumidores deban pagar mucho más por un servicio indispensable como el de acarreo, les provocará un perjuicio inaceptable el cual ha sido cuestionado judicialmente por parte de ACUDA”
De esta manera ante un desperfecto en la calle que requiera la asistencia de una grúa, habrá solo dos posibilidades:
- Tener contratado la asistencia por separado del seguro de forma prepaga, con costos de referencia que pueden ir desde los $10.000 (un servicio básico) a $ 35.000 pesos mensuales.
- No tener un servicio prepago y contratar la asistencia ante cada necesidad. Para tener de referencia hoy remolcar un auto de Mar del Plata a Buenos Aires puede costar $ 1.500.000
Para la clase media, que ya enfrenta múltiples presiones económicas, esta medida significa una nueva carga. Según consultoras externas, la calidad y cantidad del servicio de grúas son factores cruciales para los asegurados, con el 80% de los usuarios considerándolos decisivos al contratar un seguro. La eliminación de estos servicios en las pólizas estándar obligará a muchos a incurrir en gastos adicionales imprevistos o enfrentar la posibilidad de servicios deficientes y largos tiempos de espera.
Además del impacto en los consumidores, la medida tendrá repercusiones significativas en el mercado laboral del sector. Actualmente, la industria emplea a más de 13.000 personas entre directos e indirectos. Con la nueva regulación, los cuentapropistas del sector (pequeños trabajadores dueños de una grúa) enfrentarán una reducción del 80% en el volumen de trabajo y tendrán que competir con prestadores informales, lo que podría llevar a una mayor precarización laboral.