Algunos momentos de tensión se vivieron ayer entre policías y manifestantes en los alrededores del Congreso en una nueva marcha de jubilados que estuvo acompañada por distintos gremios y algunas figuras del PJ. Durante el desarrollo de la protesta la Policía aplicó el protocolo antipiquetes para impedir el corte total de calles y el freno al tránsito.

“Este operativo es impresionante. No entiendo de dónde sale tanta plata. Dicen que no hay plata para nosotros. ¿Y esto?”, cuestionó un hombre.

En la esquina de Callao y Rivadavia, efectivos de la PSA rodearon a un grupo de jubilados para evitar que bajen de la vereda para hacer un semaforazo, como estaba planificado. En tanto, hubo gritos, corridas y empujones cuando los manifestantes quisieron marchar por la avenida Entre Ríos y fueron reprimidos por las fuerzas de seguridad que usaron gas pimienta para dispersar a la multitud.

Los uniformados obligaron a los presentes a subir a la vereda, cumpliendo con el protocolo antipiquetes.