El fiscal Sebastián Scalera volvió a pedir ayer la detención del secretario adjunto del Sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, lo llamó a indagatoria y recusó al juez Luis Carzoglio, quien había rechazado esa medida en una primera instancia. Sin embargo, el magistrado recibirá la impugnación en los próximos días, ya que en medio del conflicto se tomó licencia hasta el 1 de noviembre por vacaciones.
De esta manera, el funcionario insistió en que existió una asociación ilícita liderada por Moyano que se dedicó a "defraudar al club Independiente mediante la gestión, obtención, impresión oculta y reventa de entradas y protocolos de acceso a los espectáculos deportivos". Para Scalera, el funcionamiento de esa estructura no podía escapar de la responsabilidad y conocimiento, como principal autoridad de la institución deportiva, de Hugo Moyano.
Entre las pruebas citadas por el fiscal se encuentran una serie de audios telefónicos, que vinculan al hijo de Hugo Moyano con la barrabrava del club, como lo reveló un informe de Periodismo Para Todos.