Mañana vencerá la prórroga del plazo para adherirse a la ley de blanqueo de capitales en medio de la expectativa del mercado acerca de una eventual extensión de esa medida.

La suscripción al blanqueo de capitales abrió el 1 de julio pasado y se fijó el vencimiento original para el 30 de septiembre, aunque la norma dejó en manos exclusivas del Poder Ejecutivo la posibilidad de extender el período de aceptación.

El 1 de octubre a través de un decreto del Poder Ejecutivo se dispuso una prórroga por tres meses, que opera mañana, en medio de rumores acerca de que el equipo económico, encabezado por el Ministro de Economía Axel Kicillof, evalúa extender la medida y aplicar variantes al régimen para hacerlo más atractivo.

Según el decreto, la prórroga se dispuso por ‘razones operativas y con la finalidad de permitir que una mayor cantidad de sujetos interesados puedan exteriorizar sus tenencias y acogerse a los beneficios dispuestos en la Ley 26.860‘.

El gobierno preveía un ingreso de fondos por 4.000 millones de dólares -similar a lo logrado con el blanqueo de 2009- mediante los dos títulos se ofrecen para quienes ingresen sus fondos no declarados en el exterior: el Certificado de Depósito para Inversión (CEDIN) y el Bono Argentino de Ahorro para el Desarrollo Económico (BAADE).

Sin embargo, en la primera etapa de suscripción, el interés fue muchísimo menor a la proyección oficial, e ingresaron un poco más de 340 millones de dólares.

Tras decidir la prórroga, el ex secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, mantuvo reuniones con diversos sectores empresarios para que compren títulos BAADE destinados a inversiones en infraestructura energética.

Esos contactos abarcaron a empresarios petroleros, banqueros, exportadores, de telefonía, de minería y terminales automotrices.

En ese contexto, el grupo Bridas se comprometió a invertir unos 500 millones de dólares. Para dar mayor impulso, el Banco Central emitió una circular que permite el endeudamiento para adquirir estos bonos siempre y cuando el tomador del préstamo conserve los títulos hasta su rescate final.

Por su parte, Axel Kicillof, entonces viceministro de Economía, había dicho públicamente cuando le tocó defender el Presupuesto 2014 en el Senado que él y Mercedes Marcó del Pont (eyectada del Banco Central en el último recambio de Gabinete) le habían aconsejado a la presidente Cristina Fernández de Kirchner que haya una prórroga. Defendiendo así el plan original del otro saliente funcionario, el polémico Guillermo Moreno.

Según pudo sostener Kicillof, el programa de exteriorización era ‘una medida tremendamente acertada porque no se trata solo de un blanqueo impositivo, esta vez estamos pidiendo que esa divisa que no estaba declarada, se destine a dos instrumentos económicos como la construcción y energía‘.

Los fondos ingresados al blanqueo desde que se puso en marcha, seguirían lejos de la meta oficial ya que, según algunas estimaciones, serían menos de 650 millones de dólares.