El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, se bajó de la visita al Foro Económico Mundial en Davos. El mandatario provincial anunció que no acompañará al Presidente, Mauricio Macri, a la cumbre financiera internacional que inicia hoy, por al cierre de actividades del ingenio San Isidro (de la localidad de Campo Santo), que anunció el cese de actividades y el inicio del Procedimiento Preventivo de Crisis.
“Debido a la lamentable situación del cierre de actividades del ingenio San Isidro he decidido no asistir al Foro de Davos, al que había sido invitado por el presidente de la República”, expresó Urtubey, a través de un comunicado oficial.
El salteño indicó que su responsabilidad y su corazón “están puestos en acompañar a los 730 trabajadores y a sus familias, y hacer lo imposible para que ambas partes lleguen a un acuerdo justo, tanto para ellos como para la empresa”.
Mediante un comunicado a sus trabajadores, las firmas Prosal SA y Emaisa SA, del grupo Gloria, informaron que el ingenio, fundado en 1760, presentó la semana pasada el último Procedimiento Preventivo de Crisis ante el Ministerio de Trabajo de la Nación, orientado a permitir acciones que resulten necesarias para “cesar las operaciones de la empresa”.
Urtubey agradeció “la generosa invitación del presidente Macri”, pero sostuvo que siente que se trata de su obligación como gobernador de la provincia.
Crisis azucarera
Desde la gerencia general del ingenio se detalló que mientras dure el procedimiento, los más de 700 trabajadores cobrarán el total de sus remuneraciones sin asistir a sus lugares de trabajo.
“La empresa lamenta que se haya tenido que llegar a esta extrema decisión, la cual trató de evitar en innumerables oportunidades, no habiendo contado con el entendimiento, compromiso y apoyo de la dirigencia gremial, convirtiendo a los trabajadores en los principales afectados por esta lamentable decisión”, concluye el comunicado.
El secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio San Isidro (Soeasi), Mariano Cuenca, rechazó en declaraciones a medios salteños el cese de actividades de la empresa azucarera, y agregó que intimarán a las autoridades del ingenio San Isidro “para que los trabajadores retomen las actividades, cada uno en su puesto de trabajo”.
El dirigente explicó que el sindicato espera la notificación del Ministerio de Trabajo de la Nación, dentro del plazo legal, del proceso preventivo de crisis, para ver allí lo que plantea la empresa “para paliar esta supuesta crisis”.
“No tienen fundamentos. Nosotros creemos que es una maniobra más para extorsionar a los trabajadores para que cedan derechos”, señaló Cuenca, quien aseguró que en 2015 “han intentado una maniobra similar”.
El complejo azucarero, ubicado a poco más de 50 kilómetros de la capital salteña en el departamento General Güemes, publicó además, el sábado último, un comunicado en medios locales, donde se refirió a la crisis del sector de los últimos años, que provocó que los resultados del ingenio tuvieran “una fuerte y significativa caída”.
“A lo largo de los últimos tres años, el accionista mayoritario aportó más de 50 millones de dólares propios para sanear la situación financiera de la empresa, mantenerse al día en el pago de salarios y realizar inversiones de capital”, expresa el texto. Ante esta situación, la empresa propuso al sindicato, en reiteradas ocasiones, “la reorganización de su estructura de personal”, señala el comunicado, que además se refiere a la “constante intransigencia del gremio”.
Esto -según la empresa-, “impidió el diálogo constructivo y la posibilidad de encontrar una solución a la situación de pérdidas económicas recurrentes del Ingenio San Isidro”.
La Comisión de Asuntos Laborales y Previsionales de la Cámara de Diputados de Salta anticipó que invitará a representantes del Grupo Gloria para que expliquen la situación anunciada el sábado pasado, y además convocará al Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio San Isidro.
El presidente de la Comisión, el diputado del Partido Obrero Claudio Del Plá, aseguró que “es de suma urgencia que las partes intervinientes logren llegar acuerdo en un lapso corto de tiempo, por el bien de los trabajadores salteños, que ven en peligro sus fuentes laborales