Buenos Aires, 19 de abril.- Una mujer que dice ser vidente se encadenó hoy frente a la casa de Sofía Herrera en Río Grande, la pequeña que desapareció sin dejar rastros en septiembre de 2008, ya que asegura que el cuerpo está enterrado bajo una parrilla, lo que provocó el enojo de la mamá de la nena.

La mujer, identificada como Verónica Contreras, había denunciado en 2009 que Sofía fue asesinada por sus padres, María Elena Delgado y Fabián Herrera, cuando aseguró que habían enterrado el cadáver bajo una parrilla en el patio de la casa.

El juez Eduardo López tomó declaración testimonial a la mujer e hizo inspeccionar la parrilla aludida. Además incluyó en la causa fotografías de la construcción de la parrilla, muy anterior a la desaparición de Sofía, y descartó esa posibilidad.

Sin embargo la mujer continuó insistiendo en su teoría y el fin de semana anunció a través de medios de la provincia que tomaría esta medida.

Esta mañana, muy abrigada -se registró una mínima de 1,1 grado bajo cero-, se encadenó frente a la casa con un cartel colgado del cuello que dice: "Prometí regresar porque dí mi palabra a mi gente que yo la iba a e encontrar".

María Elena Delgado no ocultó su enojo ante la actitud de la mujer y opinó que "busca prensa, quiere ganar protagonismo para conseguir clientes".

En diálogo con Radio Fueguina, la madre de Sofía dijo que la acusación de la Contreras en su contra "no tiene prueba alguna".

"Nosotros fuimos los más investigados, hasta hoy siguen investigando nuestras vidas", dijo, y le recomendó a Contreras que "vaya a la justicia y diga lo que sabe".

Por otra parte, informó que su marido Fabián se encuentra en el norte de Chile sosteniendo la campaña de búsqueda de Sofía, "repartiendo cientos de folletos con la carita de Sofía, para difundir el caso".

Es una tarea que el padre realizó también en Perú y en todo el país, y que continuará sosteniendo, dijo.