Un jurado popular encabezado por una peluquera absolvió a una mujer acusada de matar a su padre de una puñalada, pues entendió que se defendió de una agresión del hombre, quien la forzaba a ejercer la prostitución, la maltrataba e incluso habría intentado abusarla sexualmente.

El juicio se llevó a cabo en la ciudad bonaerense de Azul y concluyó con la declaración de “no culpable” de la acusada, Jennifer Ayelén Kysilka, quien tenía 19 años cuando acuchilló a su familiar.

Tras el veredicto, la joven le agradeció y saludo afectuosamente a los 12 integrantes del jurado popular.

Los hechos ocurrieron el 1 de febrero de 2014, en una casa situada en el Barrio Alberdi, de Olavarría, donde el padre, un hombre de 39 años que consumía alcohol y drogas, discutió y agredió a su hija.

El fiscal Martín Pizzolo acusó a la mujer por el delito de “homicidio agravado por el vínculo”, pero el defensor oficial Martín Marcelli pidió la absolución argumentando que la joven “se defendió de un ataque, teniendo en cuenta que su papá la golpeó como ya lo había hecho en otras oportunidades”. “Además -según dijeron testigos y la propia imputada- la obligaba a ejercer la prostitución y en una ocasión intentó también abusar sexualmente de ella”. El tribunal popular encabezado por la peluquera Cleydes Mendizábal, consideró a la acusada “no culpable” pues actuó “en legítima defensa”, lo que significó su inmediata libertad.