Un pastor evangelista que se encontraba cantando en un templo de Mendoza fue baleado en el pecho por un delincuente que entró a robar a los feligreses, pero sólo sufrió una herida leve porque un libro de canciones que tenía en sus manos frenó el impacto del proyectil. El hecho ocurrió en un pequeño templo ubicado en el distrito Rodeo del Medio, en el departamento de Maipú.
El pastor Mauricio Sanez Condorí y sus feligreses, se encontraban cantando durante una celebración religiosa, cuando dos ladrones ingresaron al templo y uno de ellos salió para actuar "de campana" en la vereda.
El asaltante que se quedó adentro mostró un arma y comenzó a caminar entre los asientos del templo a los gritos, exigiendo "billeteras y celulares" bajo amenazas de muerte.El pastor no advirtió lo sucedido y siguió cantando y rezando, lo que provocó la furia del delincuente.
Tras la llegada de la Policía y de una ambulancia, el predicador fue atendido en el lugar."Primero creí que era una bala de goma, pero después ví el agujero en el cancionero", contó el pastor y dijo que "en caso de que el ladrón se arrepienta, lo recibiría en la congregación".
