El Ministerio de Ciencia y Tecnología puso en marcha un proyecto que tiene como fin el desarrollo y la transferencia de biotecnologías para la conservación de fauna silvestre autóctona amenazada.
El proyecto está cofinanciado a través de la Agencia Nacional de Promoción del Ministerio, el Zoológico de la Ciudad de Buenos Aires, la Fundación Bioandina Argentina y el Instituto de Biología y Medicina Experimental del CONICET.
Patricia Saragüeta, investigadora del IByME y responsable del proyecto, explicó que "la creación de un banco genético es una de la maneras de conservar biodiversidad".
Indicó que "para preservar a los animales en riesgo de extinción primero hay que tener el material para estudiar la biología reproductiva en estas especies".
Destacó que "las células se pueden congelar y descongelar, se pueden guardar", y añadió que "luego cuando hay una necesidad se puede trabajar con gametas o células somáticas que provienen del descongelamiento".
Remarcó que "si hay un animal que está en riesgo de extinción, pero no se guarda el material, se pierde la posibilidad de salvarlo".
En cambio, puntualizó que "al conocer la biología reproductiva, esa especie se puede reproducir en cautiverio y luego largarla al campo".