El arzobispo de Salta, monseñor Mario Cargnello, fue denunciado por violencia de género por las monjas del Convento San Bernardo de Carmelitas Descalzas, junto a otros dos religiosos, por lo que se le prohibió el acercamiento a la residencia de las hermanas y deberá presentarse a una audiencia el próximo 3 de mayo, informaron ayer fuentes vinculadas a la causa.
"Las situaciones de hostilidad, que se dieron desde 1999 hasta el lunes pasado, llevaron a que la madre superiora decidiera hacer esta denuncia, porque las Carmelitas Descalzas necesitan vivir sin violencia, cuidar su integridad física, que respeten sus creencias y la autonomía del monasterio", expresó la abogada Claudia Zerda Lamas.
La letrada, que patrocina a las monjas denunciantes junto a José Viola, aseguró en declaraciones a FM Aries que "el hostigamiento" del arzobispo de Salta sobre las monjas de ese convento es "insoportable".
Se trata de una denuncia radicada la semana pasada ante la Oficina de Violencia Familiar y de Género de la justicia salteña, que recayó en el Juzgado de Violencia Familiar y de Género 3, a cargo de María Carolina Cáceres Moreno, cuya carátula es "Monasterio San Bernardo de Carmelitas Descalzas contra Cargnello, Mario Antonio; De Elizalde Martín, por violencia de género", aunque los denunciantes agregaron al cura Lucio Ajaya.
La jueza resolvió de manera provisoria intimar a Cargnello, De Elizalde y a Ajaya a que se abstengan de ejercer actos de violencia de todo tipo y bajo cualquier modalidad en contra de la madre priora, María Fátima del Espíritu Santo, otras dos monjas mencionadas en la denuncia y las demás hermanas del monasterio. Además, a los tres denunciados se les prohibió el acercamiento a 300 metros del Convento San Bernardo, se ordenó una custodia policial y se fijó audiencia judicial para el 3 de mayo.
El abogado Eduardo Romani se presentó ayer ante la justicia salteña como representante de Cargnello y según dijo a Télam aún no tuvo acceso al expediente, por lo que está "esperando que lo habiliten". Por su parte, Zerda Lamas reveló que "esta denuncia en la Justicia ordinaria de Salta ya ha sido motivo de otra denuncia en la Santa Sede, pero señaló que "el tiempo canónico es distinto al tiempo real".