Un informe de la Universidad Católica Argentina (UCA) advirtió ayer que pueden aparecer ‘miles‘ de nuevos pobres de sectores de clase media-baja si las medidas sociales del Gobierno son ‘débiles‘, lo que se sumaría al millón que ya surgió desde la llegada de Mauricio Macri al poder en diciembre.

‘Muy rápidamente pueden sumarse miles de nuevos pobres‘ al ‘millón‘ que ya apareció en los primeros cuatro meses del año si

‘las medidas de protección social tardan más de lo previsto, resultan débiles o no llegan‘, apunta el Barómetro de la Deuda

Social Argentina presentado ayer en Buenos Aires.

El Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA establece que la tasa de pobreza urbana aumentó un 3,6 por ciento en los primeros cuatro meses de 2016, hasta afectar a un 32,6 por ciento de la población, mientras que la de indigencia alcanzó el 3,7 por ciento, un punto más.

Las cifras son ligeramente inferiores a las estimadas en marzo, cuando la tasa de pobreza se situó en el 34,5 por ciento, mientras que la de indigencia fue del 6,9 por ciento, un descenso que se debe a aumentos en los ingresos de algunas familias, en las asignaciones universales y en las jubilaciones.

Por su parte, tanto la canasta básica alimentaria como la total, que incluye también bienes y servicios no alimentarios, como

vestimenta, educación o salud, sufrieron alrededor de un 12 por ciento de aumento entre diciembre de 2015 y abril pasado. Ahora, la canasta básica alimentaria de una familia tipo es de 7.877 pesos. La UCA señala que en estas estimaciones no se tuvieron en cuenta factores como los despidos, los recortes en sueldos, ni tampoco los recientes anuncios de incrementos en el transporte y las tarifas.

Con el título ‘Tiempo de balance: deudas sociales pendientes al final del Bicentenario. Necesidad de atender las demandas del desarrollo humano con mayor equidad e inclusión social‘, el informe fue presentado ayer en el campus Puerto Madero de la UCA por el rector de la casa de estudios, monseñor Víctor Manuel Fernández; y el director de investigación del Observatorio de la Deuda Social, Agustín Salvia.

Con la coordinación de Salvia, el equipo de la UCA relevó información de la situación social del país entre el 2010 y y el 2015, es decir, los últimos 5 años del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, y lo difundió ayer como un ‘diagnóstico cierto de la efectiva situación social heredada‘ por Macri.

Silva explicó que el informe permitió establecer que, entre diciembre y abril último, la cantidad de pobres aumentó en 1,4 millones y que ‘más de 400 mil personas se sumaron a la indigencia‘, en un contexto en el que -resaltó- ‘los programas sociales fueron un buen cinturón de seguridad‘. Silva resaltó como objetivos ‘imprescindibles para no profundizar la brecha de pobreza‘ que los sectores sociales más postergados accedan a la ‘seguridad social‘. Del informe se desprende que entre 2010 y el 2015 ‘mejoró el empleo decente‘. En la introducción, si bien se destaca que el gobierno de Macri busca ‘soluciones más estructurales en la lucha contra la pobreza a través de un régimen de mayor libertad económica, a partir de lo cual confía en lograr un derrame de inversiones, empleo y bienestar‘ considera que se han tomado medidas de alivio pero que -por lo general- se adoptaron ‘de manera tardía‘. Entre esas medidas se destaca el aumento en las prestaciones por jubilación, programas sociales y asignaciones familiares. Efe y Télam