La empresa de telecomunicaciones Telefónica, dueña de Movistar, anunció que escucha ofertas para desprenderse de sus activos en Argentina y otros países de América latina, con excepción del Brasil, según informó la empresa ayer en España.
La compañía reconoció ser receptiva a escuchar posibles ofertas en ocho mercados, como México, Argentina, Chile, Perú o Ecuador, entre otros.
De prosperar la operación en Argentina, el gobierno de Alberto Fernández deberá analizar cómo equilibrar la competencia en el mercado de telecomunicaciones. El principal jugador telco en el país es Telecom, accionista de Cablevisión y Fibertel junto al Grupo Clarín, entre otros. También talla fuerte en el mercado de telefonía celular la empresa Claro, del magnate mexicano Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo.
A partir de esto, el Consejo de la telco española aprobó "priorizar España, Brasil, Alemania y Reino Unido, como mercados clave".
En lo inmediato, Telefónica crea una nueva organización dentro de la compañía, con el objetivo de conseguir inversores o fusionarse con otras compañías en América latina. Esto busca reducir la "exposición a la volatilidad macroeconómica y cambiaria inherente", dijo su presidente José Álvarez-Pallete.