Buenos Aires, 13 de agosto.- La sudestada que se registró hoy en el Río de la Plata provocó la evacuación de unas cien personas y anegamientos en zonas de la Isla Maciel y localidades del sur del conurbano bonaerense, informaron fuentes de Defensa Civil.

El viento fuerte del sudeste hizo crecer la altura del río por encima de los tres metros en algunos lugares y obligó a evacuar viviendas en Berisso, Ensenada, Quilmes, Magdalena y Avellaneda.

Los municipios reportaron que la crecida comenzó a ceder al promediar la tarde, aunque el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advirtió que sigue vigente el alerta por la continuidad de vientos intensos del sector sur que soplan a ‘40 y 60 kilómetros por hora, con ráfagas‘.

El organismo anticipó, además, que el viento recién comenzará a ‘perder intensidad‘ durante esta noche y la madrugada de mañana.

El SMN, que depende del ministerio de Defensa, precisó que el área de cobertura del alerta incluye ‘la costa sudeste de Buenos Aires, el Río de la Plata exterior y su área marítima adyacente‘.

Por su parte, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, sobrevoló este mediodía las zonas afectadas por la sudestada y dispuso un operativo conjunto con los municipios para atender a los damnificados.

Ensenada fue la zona más afectada por el fenómeno climático, a raíz de que el río llegó hasta los 3,30 metros.

En ese distrito, más de 50 personas fueron evacuadas o se retiraron de sus viviendas por sus propios medios, dijo a DyN Carlos Bocay, director municipal de Desarrollo Social.

El funcionario reconoció que persisten los inconvenientes en la Isla Maciel, ya que no se pudo llegar hasta allí para asistir a los damnificados.

En tanto, voceros de Prefectura Naval confirmaron por la crecida del agua unas 20 personas debieron ser llevadas a un centro de atención vecinal de Berisso y otras tantas se autoevacuaron.

En los partidos bonaerenses de Tigre y Quilmes se instaló desde la primera hora del día un sistema de alerta y emergencia, pero no fue necesario evacuar vecinos de la zona ribereña porque la cota del río volvió esta tarde a niveles normales.

El prefecto de Tigre, Guillermo Rodríguez, estimó que en las próximas puede normalizarse el anegamiento de zonas de Tigre Centro y Rincón de Milberg.

‘La situación de la crecida está controlada, ya que el agua comenzó a bajar, aunque seguimos monitoreando la situación ante cualquier cambio‘, explicó.