Casi 40 años después de caer en la guerra de Malvinas, iniciará su regreso al país la cabina del avión Dagger de la Fuerza Aérea Argentina que piloteó el teniente Héctor Volponi, muerto en combate el 23 de mayo de 1982.
Esos restos de la aeronave volverán al país por la gestión de un soldado británico que recuperó esas piezas del avión durante una misión en 1988, preservándolas desde entonces para formalizar ahora su donación.
Las piezas recuperadas viajarán por estos días en correo diplomático desde Londres, según confirmó el embajador argentino en el Reino Unido, Javier Figueroa, encargado de recibir la donación del soldado David Richardson para que tenga como destino final el Museo Nacional de Malvinas de Oliva, en Córdoba.
"Es un gesto que acerca y no divide, a diferencia de otros trofeos de guerra que están en el mercado. Inclusive algunos que son objeto de una acción judicial, como es el caso del director del Museo de Malvinas y veterano de guerra, Edgardo Esteban, cuyas fotos fueron puestas a la venta en Londres. Richardson está haciendo lo contrario al acercar los restos y devolverlos", explicó.
El embajador contó que le extendió una invitación al soldado británico para agradecerle y acordaron reunirse. El avión de Volponi, un Mirage V-Dagger.3, fue derribado en la Bahía Horseshoe por un Harrier, comandado por el teniente británico Martin Hale. La aeronave cayó en el oeste de Bahía Elefante.
En 1998, durante una misión a Malvinas, Richardson, un oficial del Ejército británico, identificó los restos del avión argentino y decidió recuperarlos y preservarlos con la intención de devolverlos a Argentina.
"Mientras estaba allí, realicé una patrulla, culminando en la Isla Pebble. Este lugar era de particular interés para mí porque, siendo un niño de 12 años, seguí de cerca la guerra del 82 y había leído mucho", dijo Richardson.
"Cuando mi tropa llegó a la Isla Pebble le pregunté a un isleño si había algo que pudiera llevar a ver a mis soldados mientras estábamos allí", prosiguió. Y recordó que el hombre le "señaló en el mapa un par de lugares donde se estrellaron aviones argentinos que habían sido derribados por Harriers".
"Llevé a mi tropa y localicé esos lugares", dijo el soldado británico quien, mientras buscaba en uno de esos emplazamientos, encontró dos partes de los restos que, al juntarlos, fue posible identificar el número de serie del avión que estaba inscripto en la parte inferior de la cabina, todavía con su pintura de camuflaje original.
"Así que, con el paso de los años y el desarrollo de Internet, comencé mi investigación", manifestó. Recordó que no tardó mucho en encontrar detalles sobre quién piloteaba el avión.
"Durante muchos años cuidé las piezas", indicó y expresó que "en septiembre de 2021 busqué en Internet y logré encontrar y enviar un mensaje a Gabriel Fioni, que formaba parte del Museo Malvinas en Oliva". Richardson dijo que se alegró al saber que Fioni tenía contacto con la familia del teniente Volponi y que le asegurara que si las piezas eran donadas al Museo serían expuestas correctamente y se contaría la historia de la valentía de su piloto. "Envié los restos a Londres y su viaje de vuelta a Argentina ha comenzado", expresó el soldado. Télam