El ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, afirmó ayer que "no está cerrado el bono" para los trabajadores privados, pero "está sí la voluntad política del Gobierno" de llegar a un acuerdo con empresarios y dirigentes sindicales para que se entregue.
"A partir del lunes (por hoy) empezaremos a llamar a la UIA (Unión Industrial Argentina), a las distintas cámaras, a la CGT (Confederación General del Trabajo) y la idea es que lo más rápido posible (se otorgue el bono), para que en octubre los trabajadores puedan tener una compensación", adelantó Sica en declaraciones radiales.
Explicó que junto a los empresarios y los sindicalistas "la idea es diagramar cuál es el mejor mecanismo", para compensar la pérdida de poder adquisitivo generada luego de la devaluación del 30% del peso, tras las elecciones primarias. La CGT "obviamente pidió un bono similar a lo que hicimos en el sector público" de 5.000 pesos, pero "después empezamos a discutir y charlar con las cámaras empresarias y ver la situación de las pymes".
Sica, consultado por la negativa de los empresarios a otorgar un bono de 5.000 pesos, aseguró: "Te diría que no está cerrado el tema del bono. Lo que está sí es la voluntad política del Gobierno", de otorgarlo. "Lo que empezamos a charlar con las distintas cámaras, era la necesidad de tener alguna compensación sobre el salario real por este salto de inflación no esperada, en agosto y septiembre, y quizás un poco de octubre", explicó el ministro.
Recordó que la mayoría de las paritarias habían cerrado casi a finales de julio, todas tenían cláusulas de revisión, y con la decisión de otorgar un bono "la idea era adelantarnos también a esa discusión de quizás no abrir las paritarias de nuevo y poder buscar algún mecanismo para compensar la caída del salario real, pero sin ahogar a las empresas".