El cuello de botella que enfrentan las laboratorios fabricantes de las principales vacunas contra el coronavirus y que aumenta tensiones en Europa llegó también a Rusia que ayer confirmó la noticia más temida por el Gobierno de Alberto Fernández: habrá un retraso de dos o tres semanas en la producción de las dosis de Sputnik V que impactará, indefectiblemente, en el calendario de vacunación de Argentina que ya no llegará en tiempo y forma a las 5 millones de dosis previamente pautadas para fines de enero.

Y no sólo se sentirá con los próximos envíos sino que tendrá su impacto negativo a corto plazo.

Es que el tercer vuelo de Aerolíneas Argentinas que aterrizó ayer en Moscú traerá apenas una tercera parte del cargamento previsto. No serán las 600 mil dosis anunciadas por el Gobierno sino 220 mil.

La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, confirmó ayer en Mar del Plata que la tercera partida de vacunas Sputnik V que llegarán este jueves al país desde Rusia contiene 220 mil dosis, 110 mil de cada componente ( es decir la primera y la segunda dosis).

"Nos confirmaron recién que están llegando 220.000 dosis, 110.000 de cada componente", precisó la funcionaria.

Durante una recorrida por una Unidad Sanitaria Móvil del Ministerio de Salud, ubicada a pocos metros del Torreón del Monje en la localidad balnearia, Vizzotti dijo: "Llegó la confirmación formal y en eso nosotros somos súper cuidadosos hasta que no tenemos la confirmación, debido a esta dinámica que tiene la provisión mundial de vacunas".

El avión de Aerolíneas Argentinas que fue en búsqueda de la tercera partida de vacunas Sputnik V contra el coronavirus aterrizó a las 13.08, hora de Argentina, en el Aeropuerto Internacional Sheremétievo, tras un vuelo de 16 horas.

El Airbus 330-200, con la nominación AR1062, había despegado antenoche a las 21.10 desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, para concretar el tercer vuelo que la compañía de bandera nacional realiza a territorio ruso para trasladar vacunas.

"Realmente tenemos que poner en valor que Argentina siga recibiendo dosis y pueda seguir esta estrategia de vacunación, así que esperamos tener novedades pronto e ir recibiendo más vacunas para seguir ampliando la población objetivo que está planificada", subrayó Vizzotti.

Señaló en ese sentido que "durante los próximos días y las próximas semanas" llegarán nuevas dosis, "en función también de la disponibilidad y de todos los pasos que hay que seguir, que son bien complejos".

En ese sentido, el jefe de Gabinete del Ministerio de Salud, Lisandro Bonelli, presente también en el puesto sanitario, al igual que el intendente local Guillermo Montenegro, aseguró que el Gobierno "ya cerró contrato con tres firmas diferentes que le aseguran al país en el primer semestre de este año 51.400.000 dosis".

"Esos contratos son con el laboratorio Gamaleya, que produce la Sputnik V; el otro es con AstraZeneca, la famosa vacuna de Oxford, donde hicimos una compra de 22.400.000 dosis, y el tercero es una participación en el fondo Covax, que administra la Organización Mundial de la Salud. O sea, tenemos vacunas para 25 millones de argentinos", señaló.

Concretamente, Rusia informó ayer que algunos lotes de su vacuna Sputnik V contra el coronavirus sufrirán demoras de entre dos o tres semanas debido a la intensa demanda de América Latina, aunque afirmó que la provisión de Argentina está asegurada.

Tras recibir 600.000 dosis de la vacuna desde fin de diciembre, Argentina esperaba contar en lo que resta de enero con otros cinco millones de vacunas -que se aplica en dos dosis- y en febrero 14,7 millones adicionales.

"Es posible que algunos lotes presenten retrasos de hasta 2-3 semanas. Sin embargo, Argentina, que ha sido uno de los primeros países en aprobar Sputnik V y con quien hemos establecido una sólida alianza, seguirá recibiendo la vacuna", señalaron el Centro Gamaleya y el Fondo Ruso de Inversión Directa, que están a cargo de la producción.

El comunicado aclaró que debido a la alta demanda en América Latina, Rusia está ampliando la producción de la vacuna.

En medio de una profunda crisis económica, Argentina aspira a lograr una rápida vacunación de su población para reactivar la actividad productiva. Hasta ayer, el país sumaba un total de 1.896.053 casos del nuevo coronavirus, con 47.435 muertes, según datos oficiales.

 

  • Dudas por las variaciones del Covid-19

El director de emergencias sanitarias de la OMS, Mike Ryan, indicó ayer que las vacunas contra la Covid-19 podrían que modificarse para responder a las variantes del coronavirus, como ocurre con las que se administran contra enfermedades como la gripe. "No tenemos evidencia de que las actuales vacunas sean menos efectivas (contra las nuevas variantes de coronavirus), pero eso puede ocurrir, y en el caso de la gripe cambiamos la composición de la vacuna dos veces al año", recordó Ryan. "Las vacunas pueden perder efectividad, pero podemos adaptarlas rápidamente", subrayó, aunque para ello debe hacerse un seguimiento continuado, mediante una frecuente secuenciación.