Nuevo jefe del BCRA. "Es un honor para mí asumir la Presidencia del Banco Central y quiero agradecer la confianza que el Presidente (Mauricio) Macri tuvo en mí para encarar esta nueva etapa", dijo Guido Sandleris tras su nombramiento.

 

Aunque algunos medios ya hablaban de que había amenazado con renunciar la semana pasada por sus fuertes diferencias con el FMI la la estrategia para contener el dólar, igual la salida anticipada de Luis Caputo de la Presidencia del Banco Central no cayó bien ayer en los mercados. Aunque fue un balde de agua fría, la renuncia del jefe de la autoridad monetaria del país, recalentó al dólar que volvió a pegar un salto que achicó sobre el final para cerrar a $38,80 contra los $38,17 de lunes, pese a la escasa operatoria por el paro.

Tampoco cayó bien el el Gobierno esta salida intempestiva justo cuando el regulador monetario busca contener la fuerte devaluación del peso argentino, un 50% en lo que va del 2018, y mientras el presidente Mauricio Macri se encontraba en Nueva York renegociando el acuerdo con el FMI para lograr una ampliación en el giro de fondos.

Le reprochan el desplante y el pésimo timing de irse cuando había prometido quedarse hasta el anuncio del nuevo acuerdo con el Fondo Monetario.

En reemplazo de Caputo asumirá la titularidad del Banco Central, Guido Sandleris (hasta ahora secretario de Política Económica) y segundo del ministro de Economía, Nicolás Dujovne -ver aparte-.

Así las cosas, Dujovne, que hasta hace poco parecía estar con un pie afuera del gobierno, se quedó con todo el poder. Su cercanía y afinidad con el directora gerente del FMI, Christine Lagarde, fue clave para su segundo empoderamiento en el Gobierno. Antes, pasó de ser el ministro de Hacienda a ser el jefe de Hacienda y Finanzas. Este último, era el ministerio que, curiosamente comandaba Luis Caputo antes de ser nombrado al frente del Banco Central.

Sin respaldo político, Caputo anticipó su salida al convencerse que ya no había margen en el acuerdo con el FMI para sus planes para enfrentar la disparada del dólar: las bandas flotantes en las que la divisa podía moverse con un piso y un techo en su cotización.

El renunciado presidente del Banco Central pretendía usar esa alícuota extra del FMI calculado por su equipo entre 4.000 y 6.000 millones de dólares para intervenir cuando los mercados amenazaran el valor del tipo de cambio que se movería entre bandas (32 la mínima; 40 la máxima). Dujovne no compartía esta estrategia, y Lagarde tampoco. Y eso precipitó su final: la noche del lunes le comunicó al Presidente su renuncia indeclinable y el Gobierno la oficializó ayer minutos antes de la apertura de los mercados.

Caputo ya había anticipado a Macri su decisión de renunciar, pero a su vez había concedido compartir el anuncio formal del acuerdo con el FMI junto al ministro Dujovne. Estaría en la foto. Pero se fue antes y provocó un simbronazo en el Gobierno que el propio Macri intentó anoche enfriar.

"No me molestó el momento. Sabíamos que iba a recorrer este proceso y cuando se estabilizase la situación él iba a dejar el cargo, porque nunca tuvo vocación de ejercerlo", indicó el Presidente.

Pero Dujovne no compartió esa decisión abrupta y entendió que debía activar sin demoras su plan de emergencia, ya acordado con Macri en la intimidad del poder: Guido Sandleris, su secretario de Hacienda, sería designado presidente del Banco Central. Sandleris es considerado por el staff del FMI y fue elogiado por la directora gerente Lagarde cuando negoció el acuerdo anterior firmado en junio pasado.

Pero para la agencia Moody"s la "abrupta renuncia" de Luis Caputo al frente del Banco Central, aumentará la volatilidad cambiaria en el corto plazo.

Enemigo de tasas de interés elevadas

El economista Guido Martín Sandleris, nuevo presidente del Banco Central, es fanático del fútbol y del básquet. Quiso ser número 5 de Boca y jugar en la NBA. Recibió su doctorado en Economía de Columbia University en 2005, su maestría, también en Economía, de la London School of Economics y su Licenciatura en Economía de la Universidad de Buenos Aires.

Desde mediados de este año estuvo a cargo de la Secretaría de Política Económica del Ministerio de Hacienda. Antes, en 2016, se desempeñó como subsecretario de Finanzas de la Provincia de Buenos Aires (donde vive junto a su esposa y dos hijos) y en 2017 se sumó al gobierno nacional como jefe de asesores del Ministerio de Hacienda.

Sandleris, de 47 años, se especializa en finanzas y macroeconomía. Sus estudios analizan el efecto de las crisis financieras y los costos de los defaults soberanos. Sus trabajos fueron publicados en el Journal of International Economics, Journal of Monetary Economics, Journal of Money, Credit and Banking y Oxford University Press. Sandleris es enemigo de las tasas de interés elevadas por mucho tiempo, porque, asegura, afectan negativamente el crecimiento. Además, es coautor de la serie de libros "Hay Equipo", que están en el ranking de los más vendidos para niños.

 

Sandleris irá por una baja de la inflación

Guido Sandleris, nuevo presidente del Banco Central, aseguró ayer después de su nominación que el "objetivo principal" de la autoridad monetaria bajo su tutela será "reducir la inflación".

Los precios al consumidor aumentaron en agosto pasado un 34,4% respecto al mismo mes de 2017 y acumularon en los primeros ocho meses del año un alza del 24,3%. Aunque desde que Macri asumió la Presidencia en 2015 se propuso como objetivo derrotar la inflación, uno de los tradicionales problemas del país, en 2017 el Banco Central se había fijado una meta de inflación de entre el 12 y el 17%, pero los precios al consumidor finalmente acumularon el año pasado un alza del 24,8%. Ahora, los pronósticos optimistas para 2018 hablan de 42% de inflación.

Tras destacar que el "objetivo principal" de la entidad emisora será "reducir la inflación", Sandleris, especialista en economía internacional, finanzas y macroeconomía y con una intensa carrera académica, remarcó que junto a su equipo trabajará para "recuperar la estabilidad y previsibilidad de precios que la economía argentina tanto necesita".

 

Sintonía perfecta

En sintonía con su discípulo y ahora jefe del Central, el ministro de Economía, Nicolás Dujovne, dijo ayer desde Nueva York que la dimisión de Luis Caputo hay que verla como un "recambio lógico", y consideró que la renovada autoridad económica ayudará a empezar a "ganar la batalla contra la inflación".