El “puente de hielo” del glaciar Perito Moreno cayó ayer en la madrugada en la oscuridad y cuando no había turistas ni científicos, ni cámaras de televisión que pudieran registrar este fenómeno único en Argentina, que esta vez sorprendió además con un abundante ingreso de agua sobre la localidad santacruceña de El Calafate, la mayor en 30 años. Por este motivo algunos vecinos fueron evacuados.
“Hubo ruptura del glaciar, por eso el agua pasó para la zona baja de chacras en Calafate”, explicó a Télam Martín Freile, secretario municipal de Gobierno.
El funcionario calculó que la crecida del Lago Argentino sobre la Avenida Presidente Néstor Kirchner en la costanera local, afectó entre tres y cuatro manzanas poco pobladas.
La crecida del agua afectó hasta el momento la zona más baja del pueblo ubicada en la rotonda de la Plaza Los Troncos, según explicó el funcionario.
Para Freile “queda un día más, unos seis metros para que termine de bajar el Brazo Rico”, que, hasta que comenzaron el sábado las filtraciones que terminaron con la ruptura del glaciar esta madrugada, alcanzó una altura de 14.47 metros. Ambientalistas del colectivo local Río Santa Cruz Sin Represas interpretaron que “esto es solo el principio” y dijeron que “será mucho peor cuando el río no fluya libre hacia el mar”.
El Club Hípico, situado cerca del casco céntrico, estaba anegado antes de la ruptura del glaciar, con las primeras filtraciones, mientras que ayer la costanera estaba cortada a la altura de la reserva urbana Laguna Nimez, que exhibía sus senderos y cartelería tapados por el agua y en el sector de chacras se veía a vecinos sacar rápidamente sus pertenencias ayudados por bomberos y maquinaria municipal.
Carlos Rossel, secretario de Desarrollo Social de la Municipalidad, indicó al portal Ahora Calafate que ya fueron evacuadas cuatro familias que están alojadas en el albergue que el municipio tiene en el complejo cercano al Corralón de Maquinarias en el barrio Félix Frías. Otros en cambio optaron por ir a la casa de familiares y allegados.
Por su parte, Germán Solveyra, intendente del Parque Nacional Los Glaciares, indicó en una comunicación telefónica con Télam que no podían especificar la hora en que el arco de hielo colapsó “ya que a partir de las 22 la zona fue liberada de público”, de acuerdo a las medidas de seguridad que se establecieron para el acontecimiento que comenzó el sábado a la mañana.
Este fin de semana, a partir del conocimiento de la formación del “puente” por las filtraciones del Brazo Rico al Canal de los Témpanos, unas 10.000 personas fueron al parque, “4.000 el sábado y 6.000 el domingo”, precisó el funcionario.
Como la noticia sorprendió a todos, ya que el dique se formó en agosto del año pasado y estuvo sin “filtraciones” hasta la madrugada del sábado, sólo pudieron montar sus cámaras un canal local y uno de Capital Federal, en tanto que la Cooperativa de Teléfonos de El Calafate mantuvo su sistema permanente de transmisión en directo durante todo el año.
Pero la hora de la ruptura, sin público, el glaciar tampoco pudo contar con luz para ver lo que pasaba, pese a lo cual Solveyra detalló que “no hubo mucho ruido ni una gran caída única por lo que pudimos apreciar, como sucedió en las experiencias anteriores”.
En 2004 hubo otra caída de noche, sin público y en la oscuridad, que tampoco pudo ser filmada, tal como sucedió en la noche del domingo.
Un millón de turistas
El Parque Nacional Los Glaciares recibe un millón de visitantes por año. Es el segundo en importancia detrás del Parque Nacional Iguazú, con un 1,5 millones de turistas. Su desmoronamiento es uno de los espectáculos naturales más impactantes del mundo.