El último escollo que persistía para abreviar el juicio oral y público por el enriquecimiento ilícito de Ricardo Jaime y sus testaferros parece haber sido superado.
Este mediodía Manuel Vázquez, testaferro del ex funcionario y hacedor de negocios oscuros durante la administración de Jaime de la secretaría de Transporte del kirchnerismo, aceptó su culpabilidad, pagará una multa millonaria y obtendrá una pena. El acuerdo, según confirmaron fuentes judiciales, fue sellado con la fiscal Gabriela Baigún.
Vázquez era el único de los testaferros de Ricardo Jaime que había dicho que no tenía dinero para pagar la multa millonaria. Luego de varios operativos judiciales en los que se detectaron que Vázquez -por ejemplo- tenía obras de arte en su casa y otros objetos de valor, decidió pagar la multa que rondaría los 18 millones de pesos, que serán pagados en cuotas.
Vázquez aceptó también pagar la multa que le corresponde a su hijo Julián quien también está imputado de ser uno de los varios testaferros que usó Jaime para esconder el dinero que obtuvo ilícitamente mientras estuvo al frente de la secretaría de Transporte durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner.
Minutos antes de las 12.30 Vázquez, quien cumple prisión domiciliaria por el caso de la compra de trenes chatarra en España y Portugal, llegó al séptimo piso de los tribunales de Comodoro Py. Estaba acompañado por su abogada, su hijo Julián y su esposa Marta Margarita Silvestre.El testaferro acordó y como era el único que faltaba hacerlo el juicio será abreviado.
Vázquez tendrá una pena de tres años de prisión por el enriquecimiento ilícito que se le sumará a otras condenas anteriores. El acuerdo también implica una pena en suspenso para su hijo Julián Vázquez.
Con el acuerdo de Vázquez se suspenderá el juicio, ya que Jaime había pactado con la fiscal admitir que se enriqueció ilícitamente, pagar una multa de unos 12 millones de pesos-más la de sus familiares- y cumplir una pena de cuatro años de prisión. Esa pena se le compondrá con las otras que tiene -ya acumula ocho años de prisión- entre ellas la que le corresponde por su responsabilidad en la Tragedia de Once. El total de las multas que pagarán los imputados ronda los 40 millones de pesos.También serán decomisados 35 inmuebles, 18 autos y dos embarcaciones.
También se abreviará un juicio por una defraudación en le Ferrocarril Belgrano Cargas y por el uso de dos autos del Estado para beneficio personal por parte de Jaime. Por el uso de uno de esos autos también pagará una multa Claudio Uberti, quien estaba imputado junto a Jaime.
A Jaime y Vázquez les espera el juicio por la millonaria compra de material ferroviario en pésimas condiciones en España y Portugal. Allí estará sentado entre los acusados Julio De Vido, quien estuvo a cargo del ministerio de Planificación, de dónde dependía la secretaría de Transporte.
El caso por el aumento del patrimonio de Jaime comenzó en 2008. El fiscal Carlos Rívolo investigó al ex funcionario y halló varios bienes comprados por testaferros y lo acusó por enriquecimiento ilícito. Casi una década después, cuando el caso debía tratarse en un juicio oral y público, Jaime acordó con la fiscal. Se convertirá, cuando el acuerdo esté firmado y el dinero depositado en una cuenta del Banco Ciudad, en el primer ex funcionario kirchnerista en admitir haberse enriquecido ilícitamente. Ya había sido el primero en admitir haber recibido coimas de empresarios a los que debía controlar. También fue el primero en ser detenido en abril de 2016. Desde entonces está en la cárcel de Ezeiza.