Uno de los custodios del presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación fue separado preventivamente de sus funciones.
La Subdirección General de Seguridad de la Corte apartó provisoriamente por estas horas al agente de la policía federal Carlos Miño de sus funciones como custodio de Ricardo Lorenzetti, presidente de la Corte. Carlos es hermano de Luis Miño, uno de los exguardaespaldas del fallecido fiscal Alberto Nisman.
Según medios digitales, la separación de Carlos Miño supone que Lorenzetti sospecharía que podría estar siendo espiado por algún servicio de inteligencia. El custodio del titular del tribunal superior fue separado de su cargo a raíz de una información dada a conocer por estos días en el marco de la investigación de la muerte del fiscal Alberto Nisman.
Esta medida se inscribe en una vieja preocupación de Lorenzetti por la hipótesis de ser espiado tanto por el kirchnerismo como por el actual gobierno.
En la Corte creen que detrás de los Miño está un importante exagente de inteligencia, a quien los hermanos le reportarían. El fiscal federal Eduardo Taiano (que investiga la muerte de Nisman) sospecha que Luis Miño podría estar vinculado con servicios de inteligencia.
Fuentes policiales recordaron que “Carlos Miño hace 10 años que trabaja de custodio en la Corte y nunca tuvo un problema”. Para las fuentes otra cosa es Luis Miño quien sí, suponen, podría haber sido “informante” de los servicios de inteligencia.
El pedido de la Corte se basó en una nota periodística titulada: “El fiscal sospecha que custodios de Nisman tenían vínculos con servicios de inteligencia” basada en el dictamen en que Taiano pidió la indagatoria del técnico informático Diego Lagomarsino y de Luis Muiño.
En un dictamen, Taiano investiga el intenso y sospechoso tráfico de llamadas que el domingo 19 de enero del 2013, diez horas antes de la muerte violenta de Nisman, se activó luego de que Luis Miño hablara con Héctor Osvaldo Goncalves Pereira, un expolicía que trabajaba para la custodia del empresario Juan Navarro.
Luego Goncalvez Pereira, quien el año pasado murió en un feroz ataque de un grupo de piratas del asfalto, habló con el exdirector general de operaciones de inteligencia, Antonio Stiuso. Paralelamente, se activaban llamadas de, por ejemplo, el dos de la Agencia Federal de Inteligencia, Juan Martín Mena, con el jefe del Ejército y director de inteligencia, general César Milani. En diciembre del 2012, la expresidenta Cristina Kirchner se había apoyado en la inteligencia de Milani y echado a Stiuso, quien apoyaba a Nisman y la acusación a Irán como autor intelectual del atentado contra la AMIA, recordaron medios digitales.
En su dictamen, Taiano recordó que “Luis Miño prestaba además funciones como custodio del empresario Juan Navarro (titular del Exxel Group) y que, por ello, mantenía una estrecha vinculación con la flota (de teléfonos) registrada a nombre de “Héctor Osvaldo Goncalves Pereira”. Respecto de quienes usaban esa flota de celulares, el fiscal agregó que “algunos de los usuarios de los abonados telefónicos registrados son o han sido policías, entre ellos su hermano Carlos Miño, y/o personas vinculadas a servicios de inteligencia -conforme lo manifestado por Antonio Horacio Stiuso”.
Entre el 20 y el 21 de noviembre, el juez Julián Ercolini indagará a Luis Miño, en el marco de la causa por la muerte de Nisman. En paralelo, la Corte continuará con las investigaciones para determinar si efectivamente Carlos Miño fue designado como custodio de Lorenzetti para espiarlo. Se espera que en las indagatorias ante el juez federal Julián Ercolini, Luis Miño pueda confesar si era un informante de servicios de inteligencia y ayude a esclarecer la muerte de Nisman.
Piden informes de antecedentes
El pasado viernes, la Subdirección General de Seguridad de la Corte pidió a la Policía Federal que informe cuáles eran los antecedentes por los cuales Carlos Miño fue asignado a esa función y cuáles fueron las tareas que se le encomendaron.
Los Miño trabajaron para el titular del Exxel Group, Juan Navarro, relacionado con el excomisario Jorge “Fino” Palacios y el exespía Ciro James por la causa de las escuchas ilegales en la que Mauricio Macri fue sobreseído tan sólo 19 días después de jurar como Presidente.
Luis Miño fue el que tardó varias horas en abrir la puerta del departamento del fiscal en Puerto Madero a pesar de que debía pasar a buscarlo a la mañana. Recién ingresó al lugar a la noche, acompañado por Sara Garfunkel, mamá de Nisman.