Buenos Aires, 28 de mayo.- Cuestionado desde diversos sectores, el juez Horacio Piombo renunció al cargo que ocupaba en la Cámara de Casación Penal bonaerense. El magistrado había quedado envuelto en una polémica luego de reducir la pena de un abusador de menores en un fallo que firmó junto al juez Benjamín Sal Llargués. A la vez, Sal Llargués estaría analizando seguir sus pasos.

El martes pasado, Piombo también había renunciado a su cargo docente en la Facultad de Derecho de La Plata, justo el mismo día en que el Consejo Directivo de esa casa de estudios analizaba un pedido de juicio académico en su contra.

La polémica sobre los fallos de Piombo y Sal Llargués se desató a principios de mes cuando se conoció que habían beneficiado a un hombre acusado de violar a un niño de 6 años con la reducción de la pena de 6 años de cárcel a 3 años y 2 meses.

Los jueces fundamentaron la reducción de la pena en que el menor de edad tenía su "orientación sexual definida" porque había sido abusado anteriormente por su padre.

La resolución fue apelada por la fiscalía de Casación y se encuentra a consideración de la Suprema Corte bonaerense, que deberá resolver si revoca la sentencia o la deja firme.

Piombo y Sal Llargués afrontaban, además, un jury de enjuiciamiento por "mal desempeño de sus funciones" a raíz de una decisión similar en 2011, cuando redujeron la condena a un pastor evangélico acusado de abusar de dos adolescentes, de 14 y 16 años, de una villa de la localidad bonaerense de Merlo.