El Gobierno confeccionará desde hoy un registro nacional de trabajadores de la economía popular, a partir de una plataforma web, en la que podrán inscribirse quienes se desempeñen en tareas informales.
La idea es generar empleo genuino para salir de la crisis post pandemia y al mismo tiempo incorporar en la economía formal a unos 4 millones de personas.
El registro, que incluye una herramienta de geolocalización, está pensado para trabajadores y trabajadoras mayores de 18 años "que crearon su propio trabajo a partir de sus saberes y oficios en unidades productivas individuales o colectivas". Es también este registro una suerte de continuidad del IFE, el programa de ayuda para las familias que generó el Gobierno en medio de la cuarentena. Es que los trabajadores que estarán en este nuevo registro ahora podrán quedar blanqueados de alguna manera.
Se trata de cinco rubros concretos que el Gobierno dispondrá para ofrecer financiamiento en la compra de herramientas, insumos y créditos para el área textil, el reciclado, la construcción, la economía del cuidado personal y la producción de alimentos. La idea es que el registro incluya a vendedores ambulantes, feriantes, artesanos, cartoneras, recicladores, pequeñas agricultoras y agricultores, trabajadores sociocomunitarios, trabajadores de la construcción, infraestructura social y mejoramiento ambiental, pequeños productores manufactureros, entre otros.
Este registro de trabajadores se sustentará con $20.000 millones.