El juez Martín Yadarola dispuso que Cristian "Pity" Álvarez (46) vaya a juicio por el crimen de Cristian Díaz (36), a quien habría matado de cuatro disparos el 12 de julio pasado, en Villa Lugano. Es porque consideró que, a pesar de sus adicciones, pueden imputarle el homicidio y deberá definir su responsabilidad un tribunal oral. 

 

"En la etapa de recolección de pruebas no se entendió que tuviese una causa de inimputabilidad que lo dejara fuera del avance del juicio. Lo que no quiere decir que en el debate se interprete otra cosa", dijeron fuentes judiciales a Clarín.

 

Álvarez está detenido por el homicidio de Díaz, registrado a la 1.30 de la madrugada del jueves 12 de julio en el barrio Samoré de Villa Lugano. La víctima estaba afuera del complejo, con unos amigos. Lo vio salir a "Pity" y lo llamó por su apodo. Según los testigos discutieron, hubo un forcejeo y "Pity" le disparó cuatro veces. 

 

 

Tras pasar más de 24 horas prófugo, el líder de Viejas Locas se entregó en la comisaría 52, hasta donde llegó en el auto del abogado Sebastián Queijeiro. Antes de entrar a la sede policial, "Pity" declaró ante los periodistas que lo esperaban: "Yo fui el que disparé. Lo maté porque era él o yo".

 

No obstante, ante la Justicia, Álvarez se negó a declarar. Luego, presentó un escrito en el que "no hay un reconocimiento expreso del hecho pero sí de la situación", según indicaron fuentes con acceso al expediente. "Lo que se puso en duda son los motivos de los disparos", explicaron.

 

En la versión de "Pity", que está imputado por "homicidio simple agravado por la utilización de un arma de fuego", lo que ocurrió la noche del crimen está "vinculado a cierto hostigamiento y provocación de algunos integrantes del barrio y él dispara para defenderse".