Buenos Aires, 4 de mayo.- En la Legislatura de Buenos Aires comenzaron a debatir la creación de un Código Educativo que contempla, entre otros aspectos, un mecanismo para que los docentes sean evaluados cada cuatro años por colegas, directivos, padres y hasta por los propios alumnos.
La participación de los estudiantes en los exámenes de sus profesores será para el nivel secundario. Sería la llamada “evaluación interna”, que representará la mitad de la nota final. En esas pruebas intervendrán otros educadores, los directivos, y habrá una “autoevaluación”.
“Si un chico de 16 años puede elegir presidente, también está en condiciones de decir si le gusta o no su profesor y por qué”, argumentaron los impulsores. Además, se propone crear “bloques educativos” en los primeros dos años. O sea, las materias tendrían una continuidad y deberían ser dictadas por los mismos profesores.
Según el autor de la iniciativa, el estudiante deberá calificar con una nota y una “justificación” la tarea del educador que estuvo a cargo de la asignatura durante al menos dos tercios de la cursada.
