La televisión emitió ayer en Tailandia las primeras imágenes en el hospital de los rescatados del interior de una cueva del norte del país, en la que se pasaron más de dos semanas atrapados.
La grabación, distribuida por el servicio de prensa del operativo de rescate, muestra a los muchachos sentados en camillas y con máscaras en las caras, alguno haciendo a cámara el símbolo de la victoria con las manos.
Los médicos los tienen en cuarentena mientras recuperan sus sistemas inmunológicos.
También se mostró por primera vez un video del dramático rescate en la cueva. Las imágenes muestran a los niños dormidos tras ser sedados con un tranquilizante liviano para evitar que entren en pánico por el agua y la oscuridad del lugar y eso pusiera en riesgo el rescate. Apenas salieron, los ventilaron con un respirador manual. Fueron unas cuatro horas de travesía, por cada chico. Todo este periplo se llevó a cabo luego de la angustiosa etapa de buceo obligado. Muchos de los niños no sabían nadar.
Ahora todos se recuperan con normalidad y su vida no corre peligro, a pesar de que han perdido un promedio de dos kilos de peso cada uno durante los días que permanecieron en la gruta, de los cuales nueve los pasaron desaparecidos y sin comida.
Los doce escolares, de entre 11 y 16 años, y el entrenador, de 26, se internaron en la cueva Tham Luang, en el norte de la provincia de Chiang Rai, durante una excursión el sábado 23 de junio tras completar un entrenamiento de fútbol cuando una súbita tormenta inundó el camino de salida. Se pasaron nueve días perdidos y sin alimentos y han sido rescatados de las profundidades de la cueva entre el domingo y el martes pasados.