“Situación excepcional y puntual”, fue la frase que usó la nueva ministra de Salud Carla Vizzotti para referirse al “vacunatorio VIP” contra el coronavirus en el organismo, el escándalo que se generó a partir de las aplicaciones por “fuera de lista” de dosis por gestiones del extitular del área Ginés González García, que tuvo que renunciar. La crisis que sacude a la Casa Rosada se desató tras la confesión del periodista Horacio Verbitsky, que afirmó haber recibido la inmunización en la sede de la cartera sanitaria nacional.
La funcionaria consideró que pese a las dosis que se aplicaron en el ministerio de Salud en ese organismo “no había un vacunatorio VIP”. Manifestó que “no es habitual esta situación” y que no existe un centro de suministro de inmunizaciones “paralelo” en el Hospital Posadas. Aclaró que a ella todavía no le aplicaron la vacuna.
Sostuvo que “la discusión en su momento fue si seguían las vacunaciones a funcionarios estratégicos” y que decidieron que lo harían “cuando haya un stock considerable” de inmunizaciones. Adelantó que le propusieron al jefe de gabinete Santiago Cafiero “un trabajo de monitoreo e información sobre la distribución de las vacunas” y expresó que “no deberían sufrir inconvenientes” la confianza en las dosis y en la campaña de suministro.
Dijo que el Ministerio de Salud “le provee habitualmente vacunas al Hospital Posadas”, donde según Verbitsky inicialmente iban a darle la vacuna por las gestiones que inició con González García. Manifestó que es “incorrecto” el número de 3000 dosis para la cartera sanitaria y expresó que “de ninguna manera se reservan vacunas para una estrategia determinada”, en declaraciones a Radio 10.
Expresó que fue un grupo “muy reducido de personas” el que recibió la inmunización de forma paralela, sin respetar el orden dispuesto por el Gobierno. Entre ellos están, además del presidente del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el senador nacional del Frente de Todos Jorge Taiana, el diputado oficialista Eduardo Valdés, el canciller Felipe Solá y el jefe de Camioneros Hugo Moyano.
Vizzotti reivindicó la gestión de su antecesor, dijo que seguirá un “mismo proyecto” y que su objetivo será “volver al cauce de lo que significa” el plan de vacunación contra la enfermedad. Afirmó que tiene “sensaciones encontradas” por la controvertida situación y que esto “no puede empañar la trayectoria de Ginés, en toda su historia sanitaria”.
En cuanto a funcionarios públicos que recibieron las dosis dijo que “un intendente es personal es estratégico” y que la discusión es si vacunar a jefes comunales “genera confianza o se considera un privilegio”. Entre ellos se encuentran los intendentes de Baradero Esteban Sanzio, de Miramar Sebastián Ianantuony y de Comandante Luis Piedra Buena en Santa Cruz Federico Bodlovic.