El vocero presidencial, Manuel Adorni, consideró hoy que el paro que llevará a cabo desde este mediodía la CGT "complica la vida y es una pérdida de dinero para muchísimos argentinos" y expresó que el Gobierno nacional "viene trabajando" para que, pese a la medida de fuerza, "sea un día normal".
En su habitual conferencia de prensa, Adorni también dijo que el Gobierno "no puede dialogar" con una central obrera que paraliza el país y que es, aseguró, "un grupo minoritario".
En tanto, informó que el presidente, Javier Milei, seguirá la jornada de huelga en la Quinta de OIivos y que se reunirá con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, "para analizar los acontecimientos" derivados de la medida de fuerza.
"Encontrar hoy una vía de diálogo con gente que intenta complicar la vida al resto de los argentinos… No dejan de ser un grupo minoritario", afirmó Adorni acerca de la CGT, que convocó a un paro de 12 horas a partir de este mediodía y a una movilización frente al Congreso Nacional en rechazo a las reformas propuestas por el Gobierno.
El vocero presidencial citó las declaraciones hechas durante la mañana por la ministra Bullrich para sostener que el Ejecutivo no puede dialogar "con gente que intenta frenar el país y que, efectivamente, muestra un costado bastante antidemocrático".
Adorni se refirió a las afirmaciones efectuadas días atrás por Pablo Moyano, uno de los cotitulares de la CGT, quien dijo que la medida de protesta convocada para hoy tenía como fin "voltear el DNU" 70/23 y "la Ley Ómnibus", como se denominó en un comienzo al proyecto de Ley Bases que tuvo esta madrugada dictamen mayoritario en la Cámara de Diputados.
"En Argentina no se voltea más nada, mucho menos aquello que está en trámite parlamentario. Es muy difícil dialogar con esta gente. Consideramos que este paro es un gran sinsentido, es una complicación y una pérdida de dinero para muchísimos argentinos que quieren un país en paz", respondió Adorni a la posibilidad de establecer una vía de diálogo entre el Gobierno y la CGT.
Y agregó: "A uno le queda la triste sensación de que el paro se haya transformado en algo más político que sindical o (que procura) buscar el bienestar de un grupo de gente que ellos representan. Nosotros seguimos extrañados por la velocidad con la que lo han anunciado. En definitiva, entendemos que hoy es un día triste porque mucha gente que quiso tener un día normal, no lo va a tener", indicó el vocero presidencial.
Adorni, en tanto, confirmó que durante la huelga y la marcha frente al Congreso se pondrá en práctica el protocolo de seguridad que el Gobierno puso en marcha para evitar cortes de calles, avenidas y rutas con motivo de manifestaciones populares.
"Hay un protocolo vigente, el cual la propia ministra Bullrich ha especificado que se va a cumplir garantizando la libre circulación con los controles pertinentes", comentó el funcionario.
Consultado por Télam acerca de si el Gobierno mantendrá la decisión de descontarle la jornada no trabajada a los empleados estatales que adhieran al paro, Adorni respondió que es una "decisión tomada" y que "no tiene ningún tipo de incompatibilidad con respetar el día de paro".
"El que quiere parar que pare, pero no podemos obligar que el que no para lo pague", explicó.