Con una malla metálica. La novedosa técnica para ganarle la pulseada al ACV consiste en el uso de stent (foto). Son mallas metálicas para abrir los vasos obstruidos.

 

Una novedosa técnica llamada "trombectomía mecánica con stent" permite ampliar de seis a 24 horas la "ventana terapéutica" o tiempo para tratar un accidente cerebrovascular (ACV) isquémico, que representa el 80% de los casos en Argentina, afirmaron especialistas.

La trombectomía mecánica se usa cuando un coágulo impide la circulación de la sangre en una arteria. "Lo que hacemos es introducir un catéter por una arteria de la pierna y dirigirlo hasta el cerebro. Allí, por medio de otro catéter que va adentro del anterior, se transporta un stent (una malla extensible que se utiliza para abrir los vasos obstruidos) se atrapa el trombo y se lo retira", explicó el neurólogo y jefe del área de Enfermedades Cerebrovasculares del Instituto de Neurociencias Buenos Aires (Ineba), Gabriel Persi.

"El ACV es una emergencia de las que llamamos tiempo-dependiente, ya que mientras más rápido se actúe, mejores serán los resultados para el paciente en cuanto a secuelas", explicó Adolfo Savia, jefe del Servicio de Urgencias del Sanatorio Anchorena, con motivo del día mundial de esa afección, que se conmemora cada 29 de octubre.

El especialista detalló que hay dos tipos de ACV: isquémico (se produce cuando un trombo o coágulo interrumpe o bloquea una arteria que lleva sangre al cerebro) y hemorrágico (se producen por la rotura de un vaso, con la consecuente hemorragia cerebral).

"El isquémico es el más frecuente y se aborda mediante dos grandes tipos de tratamiento: la trombólisis endovenosa, que implica la administración de un fármaco que disuelve el coágulo en la arteria, y el tratamiento endovascular, en el que nos metemos a la arteria afectada con cateterismo (se usa un catéter o tubo) y la destapamos mecánicamente", puntualizó.

Y continuó: "En las trombólisis endovenosas la ventana de tratamiento es de tres horas en la mayoría de los pacientes. Con el tratamiento endovascular teníamos hasta seis horas y esa ventana es la que se está ampliando hoy a 24".

"Un estudio reciente demuestra que en un ACV grande mueren más o menos 1,9 millones de neuronas por cada minuto que se demora la terapéutica, por eso es muy importante actuar rápido", enfatizó.

Por su parte, Gabriel Persi recordó que en Argentina sucede un ACV cada nueve minutos y que se estima que el 90% de las personas que sobrevive queda con algún tipo de discapacidad. "En un comienzo contábamos con una ventana de tres horas para tratar con éxito a un paciente. Luego ese margen se amplió a cuatro horas y media, más tarde -mediante trombectomía mecánica con stent- a seis y hoy incluso podemos dar tratamiento exitoso luego de 16 o 24 horas de ocurrido el ataque", coincidió Persi. Télam