La Justicia rechazó hoy nuevamente el pedido de prisión domiciliaria por parte de la familia de Nahir Galarza, la joven de 19 años acusada de asesinar a su novio Fernando Pastorizzo (20 años), el 29 de diciembre del 2017.
El titular del Juzgado de Garantías de la ciudad de Gualeguay, Ignacio Telenta, resolvió que la joven deberá permanecer con prisión preventiva en la Comisaría de la Mujer de Gualeguaychú al menos hasta que se cumpla el plazo de los 60 días establecidos por la Justicia.
“Vamos a insistir por la libertad de mi hija. Por supuesto, hasta el final”, aseguró el padre de la joven, Marcelo Galarza, en declaraciones al canal A24.
La chica de 19 años acudió a los tribunales de Gualeguay con una chaqueta rosa y un pantalón blanco. Después de escuchar la resolución del juez, se fundió en un abrazo silencioso y emotivo con sus dos padres, también presentes, y se retiró del recinto con custodia policial.
Luego de escuchar a la fiscalía y a los abogados defensores de Galarza, el juez resolvió mantener la medida de la prisión preventiva ya que todavía existe el riesgo de entorpecimiento de la causa.
“En la primera audiencia ya existían elementos como para que permanezca encarcelada estos 60 días. Nosotros no hicimos más que argumentar en el mismo sentido que las veces anteriores”, afirmó el fiscal de la causa, Sergio Rondoni Caffa.
En el mismo sentido se mantuvo el abogado de la familia Pastorizzo, Rubén Virué: “Nosotros confiábamos en que la medida iba a ser confirmada. Creo que los fundamentos son más que suficientes como para que sean materia de análisis. Ahora continuaremos con la investigación esperando el juicio oral”, aseguró.
La familia del joven asesinado decidió no acudir a la audiencia en la ciudad de Gualeguay, aunque se mantuvo en contacto constante con su abogado defensor.
Se estima que mañana se realicen las pericias obligatorias que estaban estipuladas para hoy y que debieron ser pospuestas por el nuevo pedido de excarcelación de la joven acusada.
Nahir Galarza está detenida desde el mismo 29 de diciembre de 2017, acusada de haber asesinado de dos balazos a Fernando Pastorizzo con el arma de su padre. La joven se encuentra imputada por el delito de “homicidio doblemente agravado por el vínculo y por el uso de armas”.